Los cacos no cierran por vacaciones
Llega el verano y mientras unos descansan otros aprovechan para hacer su particular agosto. Los delincuentes no veranean.
Las comunidades autónomas donde más robos se producen están situadas en el arco mediterráneo y son principalmente Andalucía, Cataluña y, a cierta distancia, Valencia, donde se registran prácticamente la mitad de los asaltos anuales a hogares, unos 200.000. Por lo que respecta a ciudades, Madrid y Barcelona concentran el 25% de los ataques a la vivienda.
Menos robos que la media europea
El estudio anual sobre la Seguridad en los Hogares Españoles 2005, de TNS Demoscopia, concluye que el 16,4% de los hogares españoles, aproximadamente uno de cada seis, ha sufrido en algún momento un robo o un intento de robo. A pesar de estos datos, en materia de robos en los hogares, España se encuentra por debajo de la media europea, que alcanza a un 18% de la población, mientras que en nuestro país no llega al 15%. Una encuesta paneuropea realizada en 2004 por Security Point, plataforma europea de la seguridad, a la que pertenece el Observatorio de la Seguridad español, desvela que los países con un mayor índice de robos son Reino Unido, con un 28%, y Holanda y Suecia, con un 22% de hogares que han sufrido un robo o intento de robo.
Violencia gratuita
En los últimos tiempos vivimos en un creciente clima de inseguridad del que se hacen eco las encuestas. En la realizada el año pasado por el Observatorio de la Seguridad, un 60% de los hogares españoles afirmaba sentirse inseguro. En 2003 eran el 51%, casi un 10% menos. En opinión de los expertos, en ello ha influido sobre todo la irrupción en nuestro país de mafias extranjeras, especializadas en atracar viviendas, sin escrúpulos y habituales de la violencia gratuita.
Según han detectado las fuerzas de seguridad, en España operan más de medio millar de bandas organizadas, muchas de ellas dedicadas al robo a gran escala de chales y viviendas de lujo. La Guardia Civil calcula que hay medio millar de estos grupos con presencia en España. Bandas, de entre cinco o seis, de Europa del Este y colombianos fundamentalmente, altamente cualificados, con formación militar, expertos en el manejo de armas, con altas dosis de agresividad y, muchos de ellos, con experiencia como ex combatientes.
Dada esta situación, ante un robo en casa, los encuestados por el Observatorio de la Seguridad aseguran que les preocupa más que los ladrones les agredan y encontrarse con ellos, que los posibles destrozos o la pérdida de objetos con valor sentimental. Así las cosas, la instalación de alarmas y sistemas electrónicos de seguridad se ha convertido en un lucrativo negocio que desde 2000 crece a un ritmo del 30% anual. En 2004 el sector facturó 615 millones de euros sólo en esos conceptos. Más de la mitad de los españoles, el 55,3%, tiene una puerta blindada o acorazada; y el 15,7%, alarmas.
Alarmas, protección electrónica
La solicitud de alarmas se ha disparado en los últimos meses ante la oleada de asaltos perpetrados por bandas organizadas, especialmente en las urbanizaciones catalanas. Este fenómeno ha hecho que las llamadas a las compañías de seguridad para pedir sistemas de protección se incrementaran entre un 50 y un 80% durante el pasado mes de mayo.
Uno de los elementos que más disuaden a los intrusos que pretenden robar en un hogar son los sistemas de alarma conectados a una Central Receptora de Alarmas (CRA). En el mercado se pueden encontrar productos que se adaptan a las peculiaridades de cada vivienda. Los paquetes estándar incluyen dos o tres detectores de movimiento-intercambiables por detectores de roturas de puertas o cristales, según el tipo de inmueble. El kit se completa con sirena, pegatina exterior, conexión a una central receptora conectada con la policía, y equipo anticorte telefónico, que emite señales vía radio, mensajes similares a los de un teléfono móvil.
El precio fluctúa según las exigencias del hogar, aunque la instalación básica cuesta entre 150 y 600 euros, más cuotas mensuales de mantenimiento de entre 18 y 30 euros. La mayor parte de estos sistemas incluyen servicios adicionales como el de asistencia inmediata, en el que un vigilante se presentará en su domicilio, previa comunicación a la policía, una vez salte la señal de alarma.
Precauciones a tener en cuenta para evitar visitas desagradables
- Siempre hay que hacer uso de todas las medidas de seguridad de que disponga, aunque se vaya a ausentar por poco tiempo.
- En las casas con jardín, hay que podar los árboles y arbustos que puedan ocultar o facilitar el acceso al interior de la casa de los ladrones.
- También hay que verificar que en la puerta principal de la vivienda no existe hueco entre el suelo y la puerta, así evitaremos que los ladrones puedan hacer palanca e introducirse con mayor facilidad.
- Conviene simular que la casa está habitada. Ropa tendida, persianas a medio bajar, o temporizadores que conecten a ratos la luz, la televisión o la radio, son golpes de efecto para disuadir al delincuente.
- Marcar, catalogar y fotografiar los objetos de valor facilita su identificación en caso de que sean recuperados, y hace más difícil que, posteriormente, el ladrón pueda comercializar con la mercancía robada.
- Un lápiz marcador ultravioleta es una herramienta barata y efectiva, de fácil aplicación sobre cualquier tipo de material (metal, tela, plástico, etc.). Su único inconveniente es que se borra con el tiempo y ha de repetirse la operación de vez en cuando.
- El DNI o la matrícula del automóvil son datos muy personales y adecuados para grabar en los objetos de valor.
- Es recomendable revisar el telefonillo, el buzón y el marco de la puerta en busca de marcas (líneas verticales y horizontales) que suelen hacer los ladrones para distinguir los pisos en los que pueden entrar a robar. Si detectamos alguna de estas señales hay que intentar borrarla para que sea ilegible por los ladrones.
¿Qué debemos hacer si al llegar a casa nos encontramos con la puerta o una ventana forzadas?
Lo primero que debemos hacer es cerciorarnos de que se trata de un robo y comprobar el estado de las habitaciones, si falta algo. Una vez hecho esto, debemos llamar a la policía, o bien al 112 o al 092, explicándoles lo sucedido. No tocar nada y esperar a que la Policía llegue son otras dos pautas básicas.
¿Y cómo debemos actuar si nos encontramos, en el interior de la vivienda, cara a cara con el ladrón?
Si esto ocurre, no hay que hacerle frente. Procuraremos fijarnos en sus rasgos físicos o de indumentaria, para poder facilitar a la policía algún dato para su posterior identificación. Por ejemplo, la existencia de cicatrices, marcas, tatuajes, estatura, color de pelo, si lo lleva largo o teñido, etc. Pero una vez más, lo más importante es no enfrentarse al ladrón bajo ninguna circunstancia. Hay que tener en cuenta que estas personas, en esos momentos están sometidas a una gran tensión, y las reacciones pueden ser impredecibles y peligrosas. Últimamente, además, en ciertos tipos de robos se están dando casos de un gran despliegue de violencia.
¿Y si oímos que alguien ha entrado en nuestra casa, estando nosotros en ella? En este caso, los consejos son similares a los anteriores: confirmar si ha entrado alguien, y en caso afirmativo, llamar a la policía.
Puertas y ventanas
- Instale en su vivienda una puerta blindada, las hay desde 700 euros. Si su economía no se lo permite, procure que tenga, al menos, dos puntos de cierre, y que no haya hueco entre la puerta y el suelo.
- En la elección de la cerradura hay que fijarse en las siglas A2P (certificado de seguridad) y las estrellas (de una a tres). Cuantas más de estas últimas tenga, más eficaz será el sistema de cierre.
Hay que fijarse en las siglas A2P y las estrellas - Para que sea eficaz, una cerradura ha de tener varios puntos de anclaje al marco de la puerta, con un mínimo de tres (en la parte superior, en la inferior y en el lateral). Cuanto mayor sea el número de anclajes, mayor será su resistencia.
- Preste atención a la puerta del garaje, si su casa comunica directamente con el aparcamiento. Manténgala siempre cerrada.
- Una ventana de madera resiste mejor los ataques que las de PVC o de aluminio, más fáciles de deformar.
/imgs/20060701/img.informe.05.jpg - Un acristalamiento de doble vidrio con cámara interior, en el que la hoja externa es laminar, también ofrece un buen grado de protección.
- Ponga persianas en todas sus ventanas y balcones y asegúrelas con un cerrojo interior. La mejor elección son las persianas autoblocantes, que impiden que la persiana sea forzada al levantarla por medio de un sistema de lamas (cada uno de los listones que componen la persiana) de diferentes tamaños. Desde 250 euros.
- Proteja con rejas las ventanas de fácil acceso desde el exterior. La separación entre los barrotes no debe ser mayor de 12 centímetros. Por 180 euros se puede proteger una ventana.
Para una buena elección de alarma
- Hay de dos tipos de alarmas: sin conexión a una central receptora de alarmas o con conexión, que es, según los expertos, la opción más interesante.
Sólo la placa identificativa del sistema de alarma ya es un elemento disuasorio A menudo sólo la placa identificativa del sistema de alarma ya es un elemento disuasorio para los ladrones. - En casas unifamiliares o adosados, es preferible optar por un dispositivo con elementos conectados a través de enlaces de radio. Así, los componentes periféricos se fijan sin necesidad de cableado.
- La mejor elección es un sistema de alarma con posibilidades de expansión, que permite la instalación de un equipamiento mínimo que se puede ir mejorando progresivamente.
- Es posible crear una puerta con electroimán en el acceso a la parte superior de la vivienda, de forma que cuando se detecte que hay alguien inesperado entrando por puertas o ventanas inferiores del unifamiliar, automáticamente esta puerta quede bloqueada, impidiendo el acceso a la parte superior.
- Más sofisticada resulta la creación de una habitación fortificada dentro de la casa. Se trata de una especie de caja fuerte para personas, con paredes de hormigón, puerta acorazada y otras características que la hacen prácticamente inexpugnable. Sus medidas varían en función del número de personas para las que esté prevista. Dentro, una línea de teléfono segura o un móvil siempre disponible completan la solución que representa este sistema en caso de robo cuando hay gente dentro de la casa. La existencia de estas “habitaciones del pánico”, cuyo precio puede oscilar entre los 6.000 y los 60.000 euros, no es una rareza en nuestro país aunque la confidencialidad sobre el asunto que exigen sus dueños hace que lo parezca.