Afasia / Hacer dieta sin realizar ejercicio / Conocer el sexo del bebé a las seis semanas de embarazo / Radiación para diferenciar células cancerígenas de las sanas / Vitamina D y esclerosis múltiple / Dra. Teresa Noguer

1 febrero de 2007

Afasia / Hacer dieta sin realizar ejercicio / Conocer el sexo del bebé a las seis semanas de embarazo / Radiación para diferenciar células cancerígenas de las sanas / Vitamina D y esclerosis múltiple / Dra. Teresa Noguer

En cuatro palabras

Afasia:

/imgs/20070201/img.despiece-salud.01.jpg Es la pérdida de la capacidad para utilizar el lenguaje debido a una lesión en el cerebro. Un ictus, un tumor o un traumatismo craneal pueden lesionar el lóbulo temporal izquierdo y la región adyacente del lóbulo frontal, que controlan la función del lenguaje, y propiciar que quienes la padecen queden parcial o totalmente incapacitados para comprender o expresar palabras.

El que avisa no es traidor

Hacer dieta sin realizar ejercicio puede perjudicar a los huesos

/imgs/20070201/img.despiece-salud.02.jpg La comunidad médica coincide en afirmar que el exceso de kilos puede ser nocivo para la salud. Ésta es una de las razones por las que las personas con sobrepeso deciden seguir una dieta. Sin embargo, hay que tener en cuenta que si se realiza un plan de adelgazamiento sin hacer ejercicio físico, los huesos pueden resentirse porque cuando se adelgaza no sólo se pierde peso, sino también masa ósea, especialmente en las zonas que son más propensas a sufrir fracturas, como la columna, la cadera y las piernas. Así lo aseguran investigadores de la Universidad de San Luis (Estados Unidos) en un estudio publicado en la revista Archives of Internal Medicine. Tras analizar a 36 personas con sobrepeso, cada uno un plan distinto de adelgazamiento, (18 pacientes hicieron régimen, y 18 practicaron ejercicio), se pudo comprobar que el grupo que realizó dieta perdió también masa ósea.

Noticias

Un análisis permite conocer el sexo del bebé a las seis semanas de embarazo

/imgs/20070201/img.despiece-salud.03.jpg Un equipo de genetistas de la Fundación Jiménez Díaz, de Madrid, ha desarrollado un método que permite conocer el sexo del bebé con un análisis de sangre a la madre desde la sexta semana de gestación. La técnica permite saber en 48 horas si el ADN del feto presenta el gen SRY, responsable del sexo masculino. Conocer el sexo del niño en una fase tan temprana del embarazo es muy útil para el tratamiento precoz de diversas enfermedades como la hemofilia, el síndrome adrenogenital congénito o la distrofia muscular de Duchenne.

Radiación para diferenciar células cancerígenas de las sanas

Científicos del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad de Bath, en Reino Unido, han logrado controlar un tipo de radiación con el que se diferencian las células cancerígenas de las sanas. Agrupadas en un puntero de menos de 1 milímetro de espesor, permite realizar un barrido completo de la zona en que se localiza un tumor, distinguiendo con precisión hasta dónde se ha extendido la materia cancerígena. La radiación es de un tipo 1.000 millones de veces más débil que los rayos X, por lo que no provocaría daño en los pacientes.

Vitamina D y esclerosis múltiple

/imgs/20070201/img.despiece-salud.04.jpg Las personas que tengan niveles altos de vitamina D en sangre tienen hasta un 62% menos de posibilidades de desarrollar esclerosis múltiple, según un estudio de la Escuela de Salud Pública de Harvard, en Boston, editado en Journal of the American Medical Association. Los científicos señalan, además, que el mayor riesgo de padecer esta enfermedad se da entre los familiares de primer grado de quienes ya sufren este mal, por lo que se debería realizar entre esta población un ensayo para prevenirla.

Dra. Teresa Noguer. Oftalmóloga pediátrica

“Del mismo modo que protegemos la piel de los niños frente al sol, debemos proteger sus ojos”

/imgs/20070201/img.despiece-salud.05.jpg Muchos niños de este país andan “requeteconcentrados”, siguiendo con sus ojos los juegos de videoconsola que les han traído los Reyes. ¿Tiene consecuencias perjudiciales?
Conviene que haya un horario, que el tiempo diario que pasan frente a estos artilugios no exceda, por ejemplo, de dos horas. Estos aparatos exigen mucha atención visual y acercarse mucho a la pantalla, por lo que generan cierta propensión a la miopía. Esta situación es más grave en menores de 10 años, que aún no tienen conformado su sistema visual.

¿Los contraindicamos?
No, puesto que hay casos en los que pueden resultar terapéuticos.

¿Perdón?
Los oftalmólogos podemos “prescribir” el uso de videojuegos a niños con problemas de ojo vago, puesto que el hábito de jugar podrá corregir en estos casos un defecto fisiológico.

¿Ocurre lo mismo con la televisión o el móvil?
Cuanto más lejos estén las pantallas, mejor. Con los televisores no hay tanto problema, puesto que las pantallas son cada vez mayores y se colocan más lejos, pero con el móvil tenemos que esforzar demasiado la mirada y, como he apuntado antes, esto genera la aparición de miopías.

¿A qué edad debe revisarse la vista de un niño por primera vez?
Los pediatras están haciendo una buena labor de cribado, lo que ocurre es que empiezan demasiado tarde (hacia los cinco años). Si los padres tienen antecedentes de problemas visuales (ceguera, miopía, glaucoma o catarata) el niño debe hacerse una primera revisión con un año de edad. En circunstancias normales se puede esperar a los dos o tres años, pero no más, porque cuanto más pasa el tiempo más difícil y costoso es corregir futuros problemas.

¿Deben leer antes de acostarse, ayudados por la luz de una lámpara de cabecera?
Tanto en los dormitorios de casa como en los hoteles tenemos esa maldita tendencia a cerrar la luz del techo y leer sólo con la de cabecera: es un error. Para los ojos, es mejor leer con ambas luces encendidas (que no es preciso que reúnan una potencia excesiva), y apagarlas después.

¿La oscuridad protege?
Digámoslo al revés: demasiada luz acaba cegando. Los ojos se “gastan” en virtud de la cantidad de luz que absorben.

Con gafas de sol ya desde bebés?
¡Excelente idea! Del mismo modo que protegemos la piel de los niños frente al sol, debiéramos proteger sus ojos.