ADSL

Por la vía rápida

El ADSL es una alternativa veloz a las lentas conexiones por módem convencional
1 enero de 2002
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Por la vía rápida

En 1975 se creía que la máxima velocidad de transmisión de datos a través de líneas telefónicas convencionales era 1,5 kilobits por segundo. Un cuarto de siglo después, el flujo de 56 kilobits por segundos (lo que se conoce como 56k) que llega a la mayoría de hogares conectados a Internet sabe a poco. Y es que 56k resultan suficientes para enviar y recibir textos y fotografías no demasiado grandes, pero convierten en una desesperante y lenta tortura descargar música y vídeos de la Red.

Los científicos siguen exprimiendo el hilo de cobre para que en él viajen apiñados más y más datos y no haya que cambiar el cableado que llega hasta cada hogar. Así ha nacido la tecnología ADSL, que hace uso de frecuencias hasta ahora desaprovechadas en las transmisiones telefónicas para conseguir una conexión de mayor calidad.

Velocidad asimétrica

La velocidad del ADSL es asimétrica, esto es, traer algo de Internet resulta mucho más rápido que enviar algo a la Red. Lejos de ser un contratiempo, este esquema de trabajo se adapta a los hábitos de la mayoría de internautas. Haga la prueba: la próxima vez que corte la conexión fíjese en el contador de bytes recibidos y enviados. Verá que la mayoría de las veces el primero es mucho mayor que el segundo. En caso de tener más de un ordenador en casa no hace falta contratar varias líneas ADSL, se puede compartir el flujo de datos de una sola conexión entre todos los equipos. La velocidad que ofrecen las operadoras suele ser la máxima teórica que sólo se alcanza en condiciones ideales (más bien utópicas). A la hora de contratar ADSL fíjese si le garantizan un caudal mínimo. Si no, quizá acabe con un deportivo que se mueva sólo entre atascos. Compruebe también que no limitan ningún servicio. Aunque la mayoría de internautas únicamente utiliza una serie concreta de protocolos y puertos, quizá algún día decida utilizar esos que, de entrada, están bloqueados.

Ventajas sí, pero también inconvenientes

Las ventajas del ADSL son notables: el usuario está siempre conectado, y navegue lo que navegue paga un fijo mensual, que en España ronda los 40 euros (6.655 pesetas) para los hogares. Esto hace que sea una tecnología especialmente indicada para los internautas que hacen un uso intensivo de la Red. Este tipo de conexión es, además, sustancialmente más veloz que la de un módem convencional. En España, la máxima velocidad comercializada es de 2.000 kilobits por segundos (2 megabits/s), aunque este torrente de datos sólo se encuentra disponible para empresas. Los hogares se tendrán que conformar con flujos más modestos, entre 128 y 256 kilobits por segundo. Con esa velocidad se pueden escuchar ya actuaciones en vivo con la calidad de un CD.

¿Los inconvenientes? Si no se utiliza mucho Internet la conexión por ADSL cuesta más que la tradicional. Es necesario un nuevo módem (bastante más caro que los de 56k) para funcionar. Además, esta tecnología no se puede instalar en cualquier hogar: el usuario debe estar a menos de tres kilómetros de una central telefónica que ofrezca este servicio (no todas lo hacen). El ADSL es incompatible con otros servicios como el hilo musical, por lo que cada usuario deberá informarse de la particularidad de su instalación.

Larga vida al cobre

¿Pero, por qué desarrollar el ADSL en vez de potenciar la fibra óptica cuyas bondades hemos oído los últimos años? Es cierto que la fibra óptica tiene teóricamente un potencial mayor que el cobre. En ella puede viajar el teléfono, los datos y hasta la televisión y la radio digital. No obstante, el cobre es prácticamente ubicuo, ya que se trata de la tecnología que se usa en la telefonía convencional. Su coste de instalación es, por tanto, mucho menor. Además, mantener el cableado tradicional es estratégico: el cobre no necesita electricidad para transmitir. Por eso, en las catástrofes, aunque se corte el suministro eléctrico, los teléfonos continúan sirviendo de nexo entre las personas.

Pero, el ADSL no es, ni mucho menos, el último paso. De la misma forma en que mes a mes ordenadores más potentes hacen languidecer a los que parecían el último grito, nuevas conexiones aún por llegar acabarán por permitir que el flujo de datos no sea el cuello de botella que impida a los usuarios hacer un uso verdaderamente multimedia e interactivo de Internet.

Banda Ancha
www.bandaancha.com


Portal en español sobre los diferentes acceso de banda ancha que existen en el mercado. Permite comparar las diferentes alternativas para escoger el tipo de acceso que más se amolda a nuestras necesidades.

Asociación de Internautas
www.internautas.org

La Asociación de Internautas ha puesto en marcha una sección en su web donde se desgranan las últimas novedades sobre el ADSL en España. Incluye textos de referencia y un enlace a la página del Ministerio de Ciencia y Tecnología donde comprobar si nuestro número de teléfono soporta ADSL.

Noticias 3D
www.noticias3d.com


Sitio-web dedicado a la información sobre los componentes del ordenador con información actualizada sobre las últimas tarjetas de vídeo y placas base. Incluye un completo y accesible artículo sobre las características del ADSL y sus similitudes y diferencias con otras conexiones de banda ancha.

La seguridad, en entredicho

Si no se toman las debidas precauciones el ADSL puede convertirse en la rendija por la que se cuelen a nuestro ordenador los habitantes más indeseables de la Red. No se trata de que la conexión por ADSL sea más insegura que las tradicionales. Pero la alta velocidad de conexión hará que si el equipo cae en malas manos, los estragos sean mayores.

  • No deje el ordenador todo el día encendido con la conexión abierta a la Red. Si lo hace, usuarios sin escrúpulos tendrán todo el día para probar las brechas de seguridad de su equipo y acceder a su información.
  • No abra ningún correo que no le inspire confianza ni instale nada desconocido. El mejor antivirus es la prudencia.
  • Instale regularmente los parches que sacan los fabricantes de programas. Suelen tapar las vulnerabilidades con las que los vendieron.
  • Instale un antivirus. Los daños que puede hacer uno de estos bichillos electrónicos en un ordenador con una conexión de banda ancha como el ADSL son mayores.
  • Coloque un cortafuegos (firewall). No permiten que salga o entre un solo dato no autorizado al ordenador, esto es, comprueban si un programa oculto ha tomado el control del sistema y se dedica a usar la conexión a su antojo.
  • Sea realista, ¿qué tiene usted que pueda interesar a un pirata informático?