Menos revolucionario que a primera Vista

Menos revolucionario que a primera Vista

/imgs/20070501/img.internet.01.jpg El cambio del sistema operativo de un ordenador se parece mucho a sustituir el motor un coche (y es mucho más barato). Si se hace bien, el equipo se modernizará y permitirá cosas que antes eran impensables. Pero no siempre es posible: un “seiscientos” no irá muy lejos con el motor de un Ferrari. Es necesario un equilibrio entre las capacidades físicas del equipo y las prestaciones del nuevo inquilino. A fin de cuentas, el sistema operativo es el programa que manda sobre el resto de los programas, el idioma en el que habla el ordenador. Microsoft ha sustituido, seis años después, su sistema operativo estrella, Windows XP, por el más moderno Windows Vista y los usuarios se enfrentan al dilema de si el cambio merece la pena o si es mejor quedarse como están.

Aero, el escritorio transparente

¿Qué es lo que aporta el nuevo sistema? En primer lugar, un nuevo entorno gráfico, conocido como Aero. Es más ligero y dinámico, con ventanas transparentes que permiten ver lo que hay detrás de ellas sin necesidad de hacer tantos clics como ahora. Además, las ventanas rotan en tres dimensiones para hacer más “animado” el cambio de un programa a otro en un movimiento realmente espectacular (aunque ya visto en Mac OS X y algunas versiones de Linux).

Los colores por defecto son más atenuados, predominando el verde pastel (hay quien afirma que tiene reminiscencias del sistema operativo de Apple, Mac OS). Incorpora además el nuevo Internet Explorer 7, pero no el Windows Media Player 11, que de todos modos se puede descargar desde Internet gratuitamente. El sistema, además, asesora de manera activa al usuario en su aprendizaje. Posee también una barra lateral con pequeños programas (Widgets) que indican la hora, la temperatura, muestran fotografías… Con Windows XP para disfrutar de este servicio era necesario instalar aplicaciones externas como Yahoo! Widgets o Google Desktop.

Vista está pensado para tener una de sus patas en la Red, esto es, para estar siempre conectado. La compra de Vista da también derecho a disfrutar de servicios como Windows Live, el espacio personal al que el usuario puede acceder y desde donde puede comprar, guardar (dependiendo de la versión) y compartir películas, videojuegos, fotografías y música. Por supuesto, cuanto más cara es la versión que se posee, más acceso se tiene a los servicios que ofrece Microsoft.

En materia de seguridad, una de las lagunas tradicionales de la compañía, Microsoft afirma que hay mejoras: el cortafuegos de Vista ejerce un control más férreo sobre todo lo que se descarga en el ordenador, aunque no lleva un antivirus incorporado, como se rumoreó en un principio. Eso sí, dispone de un sistema de control de copias y contenidos no legales (Windows Software Protection Platform) que puede rebajar sustancialmente las capacidades del sistema si no se demuestra que se ha pagado su licencia de uso.

En cualquier caso, el auge del sistema operativo libre y gratuito Linux, que cuenta con versiones tan sencillas de utilizar y potentes como Ubuntu hacen difícil pronosticar si Vista, un sistema que no incluye mejoras revolucionarias, conseguirá ser tan ubicuo como lo es ahora XP.

En siete versiones

Windows Vista intenta aunar dos mundos: la interconexión y el ocio multimedia. Pero no se trata de un único sistema operativo: Microsoft lo ha dividido en siete versiones: tres son para empresas y otras cuatro están pensadas para el usuario doméstico, en función de la capacidad de su ordenador y de su poder adquisitivo (el precio se mueve entre los 70 euros y los 300 euros). Los más potentes están dirigidos para los usuarios “jugones”, que requieren de una alta capacidad de proceso, mientras que los más sencillos cubren de sobra las necesidades de los que sólo pretenden escribir documentos, utilizar hojas de cálculo o navegar por Internet.

Las versiones para el hogar van desde la más barata y elemental (“Windows Vista Home Basic”, similar al actual “XP Home Edition”), hasta la más cara y completa, “Windows Vista Ultimate”, pensada para crear una comunidad virtual de usuarios que juegan juntos a videjuegos, escuchan música en red y comparten películas y otros archivos mediante canales P2P (de amigo a amigo) de manera exclusiva. La versión que se prevé más popular será una de las intermedias, “Windows Vista Home Premium”, que es una mezcla del PC tradicional y un gestor del entretenimiento multimedia con capacidad para grabar DVD y reproducir archivos con calidad de televisión de alta definición.