Calma y sensatez, lo primero
Con la llegada del buen tiempo pasamos más tiempo fuera de casa con nuestras mascotas con lo que las probabilidades de sufrir algún percance por accidente, picaduras, intoxicación o mordeduras se multiplican. Mientras llega la asistencia veterinaria, saber cómo actuar en una emergencia puede salvar la vida de su mascota.
- El calor y los rayos solares también afectan a los animales. Uno de los primeros síntomas del golpe de calor es un jadeo constante. Si le ocurre esto a su mascota lleve al animal a un lugar fresco y pásele una esponja mojada por la cara para refrescarlo y facilitarle la respiración. Si es posible sumerja al animal en agua fría. También puede cubrirlo con una toalla mojada e ir salpicando la misma con agua fría para que no se caliente. Además, deje que beba toda el agua que quiera.
- Aunque no es habitual, los perros también pueden sufrir un ataque cardíaco. En estos casos, mientras espera que llegue el veterinario, tumbe al animal sobre el costado derecho, con la cabeza y extremidades extendidas, y realícele un masaje cardíaco. Para ello ponga la mano en el lomo sobre la pata izquierda y con la otra encima presione desde arriba 6 veces a intervalos de un segundo.
Accidentes
- En caso de accidente, tumbe al animal en posición de salvamento, tendido sobre su costado derecho y manténgalo abrigado cubierto con una manta. Si está inconsciente, colóquele el cuello de forma recta, ábrale la boca y sáquele la lengua con cuidado y elimine cualquier material que pueda impedir el paso del aire.
- Cuando lo traslade para recibir atención, intente que sea lo menos incómodo y doloroso para él. Lo más adecuado para su desplazamiento es acostarlo sobre una manta, si lo lleva en auto nunca lo ponga en el suelo porque el menor frenazo podría lastimarlo aún más.
- En caso de hemorragia, aplique sobre la herida una compresa de tela, nunca de algodón, empapada en agua. Una vez que se haya detenido, corte el pelo alrededor de la herida para que permanezca limpia y la curación se acelere. Luego acuda al veterinario.
- Ante una fractura, actúe con cuidado y suavidad, evitando todo movimiento innecesario.
Intoxicaciones y envenenamientos
- En caso de envenenamiento haga todo lo posible por identificar el veneno.
- Si el animal ha ingerido materiales corrosivos, trate de que beba leche o agua para diluir el veneno.
- Si el tóxico entra en contacto con la piel, lávelo inmediatamente con grandes cantidades de agua para evitar que al lamerse ingiera el veneno. Si es necesario, córtele el pelo para eliminar los restos del producto.
Urgencias óticas y oculares
- Nunca manipule el conducto auditivo de su mascota ni introduzca ningún tipo de material (algodón, gasa…). El veterinario es quien debe realizar la extracción de cualquier cuerpo extraño.
- Si la herida se ha producido en un ojo y éste se encuentra completamente cerrado, no trate de forzarle para que abra los párpados.
- Si el ojo está fuera de su órbita, no intente reponerlo en su sitio. Manténgalo humedecido y protegido mientras busca ayuda veterinaria.
- Si el globo ocular sufre una quemadura química, lávelo rápidamente y retire con un algodón humedecido los restos del agente agresor.
Picaduras de insectos
- Si se ha producido una fractura abierta detenga la hemorragia por medio de un torniquete, pero aplíquelo sólo durante algunos minutos (nunca más de 15), utilizando tiras de tela y evitando las gomas o cuerdas. Siempre por encima de la herida, entre ésta y el corazón.
- En caso de picadura de avispa (veneno alcalino), lave la zona con vinagre diluido en agua. Si la picadura es de abeja (veneno ácido), puede aplicar en la zona bicarbonato de sodio.
- Como cuidados de emergencias, y si la hinchazón es severa, debe aplicar compresas de agua fría o tibia. Si el aguijón está en la zona de ojos, nariz o boca, lleve a su mascota al veterinario inmediatamente y evite darle agua.