Con toda la garantía
Las averías en los electrodomésticos son una molestia que tarde o temprano visita a la gran mayoría de hogares. Por muy buen resultado que ofrezca, ni el más sofisticado aparato de última generación está libre de sufrir percances. En estos casos, lo normal es acudir a los servicios de asistencia técnica (SAT). Pero a veces, el desplazamiento del técnico, el recambio de las piezas estropeadas y el coste de la mano de obra pueden suponer una cuantía considerable que no compensa la reparación. He aquí algunas claves para una resolución satisfactoria.
Reparación en garantía
- Recuerde que cuando adquiere un producto, también tiene derecho a exigir la reparación de ese producto si se estropea, siempre y cuando, eso si, que no se haya hecho un uso indebido del mismo.
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/imgs/20050601/documento.jpg Asegúrese de que la marca tiene un adecuado servicio de asistencia técnica. Desconfíe de la publicidad en la que aparece un número de teléfono de tarificación adicional, es decir, más caro (los 803, 806, 807…) o un móvil y no se indica un domicilio. - Conserve, junto al manual de instrucciones de los aparatos que compre, la tarjeta de garantía y la factura o ticket de compra.
- Durante los primeros seis meses de garantía de un producto nuevo se presupone que el daño o avería viene de fábrica y el vendedor debe asumir los gastos de la reparación, tanto piezas, traslado, como horas de trabajo. Si han pasado esos seis meses, es el consumidor quien debe demostrar que el fallo viene de origen y que no ha sido provocado por un mal uso del producto (si así lo requiere el vendedor).
- No manipule el aparato porque perderá el derecho de reclamar, aunque el defecto provenga de fábrica.
- El tiempo de la garantía queda en suspenso durante el tiempo que el electrodoméstico esté en reparación.
- La garantía legal y obligatoria del fabricante es de dos años. La garantía comercial, la que cada fabricante, vendedor, etc. añade voluntariamente a la legal, es interesante porque amplía el plazo legal de dos años. Pero no olvide que suele tener limitaciones frente a la obligatoria y que en algunos casos está condicionada al cumplimiento de determinados requisitos. Es habitual, por ejemplo, que establezca que el desplazamiento o las piezas tengan que abonarse.
- No olvide que los bienes de segunda mano comprados a un empresario o profesional también gozan de una garantía mínima de un año.
- Sepa que puede exigir una indemnización por los daños o perjuicios derivados de la avería y el tiempo de reparación. Esto es, si adquiere una nevera y se estropea a la semana de compra, además de solicitar que se haga efectiva la garantía, puede exigir una indemnización por los alimentos que se han estropeado ante el mal funcionamiento del electrodoméstico.
Sin garantía, pida presupuesto
- Si la garantía ya ha vencido, pida presupuesto en varios talleres de reparación, además de al servicio técnico.
/imgs/20050601/consejos01.jpg Sondee por teléfono si merece la pena hacer la reparación, cuánto puede costarle, cuánto cobran por mano de obra y desplazamiento… Si comprueba que le interesa, pida el presupuesto por escrito. Debe detallar el precio final de la reparación, que habrá de incluir tanto la mano de obra como la sustitución de piezas y los gastos de desplazamiento, si los hubiera, las llamadas “salidas”. Si no consta el IVA ni se dice expresamente “no incluido” se entiende incluido en el precio final.- No olvide que sólo está obligado al pago de la elaboración del presupuesto cuando, tras haberlo solicitado, no lo acepte.
- Por la elaboración del presupuesto pueden cobrarle los siguientes importes:
- Para pequeños aparatos de uso doméstico: el importe correspondiente a quince minutos de mano de obra.
- Para línea blanca: el correspondiente a treinta minutos.
- Para línea marrón y electrónica: el correspondiente a una hora de mano de obra.
- Si no acepta el presupuesto, le deben devolver el aparato en las mismas condiciones en que lo entregó.
- El presupuesto entregado debe ser válido hasta 30 días después de su comunicación.
En el taller
- Recuerde que en periodo de garantía no le pueden cobrar el desplazamiento, la mano de obra, las piezas ni los impuestos.
- Si no está en garantía, es preferible que usted lleve el objeto a reparar. Evitará gastos.
- Sólo le pueden cobrar una vez por desplazamiento a su domicilio. No importa si el arreglo conlleva varios viajes o si han acudido a la casa y no han podido trabajar porque estuviera ausente.
- Si la reparación se realiza en casa, tiene derecho a que le informen con antelación de las tarifas de reparación.
- Esté o no en garantía, solicite un resguardo en el que se justifique la entrega del electrodoméstico. Para ello el aparato deberá estar identificado: marca, línea, serie, etc.
- Antes de llevarse el aparato a casa, o de que el técnico se marche, compruebe que funciona correctamente.
- Una vez realizado el arreglo, retire el aparato cuanto antes. Pueden cobrarle en concepto de consigna por día de almacenaje a partir del plazo de un mes desde que se le comunicó que pasara a recogerlo. Solicite, incluso si está en garantía, una factura detallada en la que se especifique el CIF de la empresa, la reparación efectuada, las horas de trabajo, el precio de la mano de obra, las piezas sustituidas, el IVA y el plazo de garantía de la reparación.
- Sepa que los talleres de reparación deben exponer de forma clara y visible los precios por hora de reparación y los gastos de desplazamiento.
- Cerciórese de que las piezas sustituidas son nuevas. Tiene derecho a que le entreguen las antiguas.
- La garantía mínima de reparación es de tres meses y cubre también los desplazamientos y las piezas reparadas o sustituidas, por eso es fundamental que conserve durante dicho periodo la correspondiente factura.