Uno de cada tres suspende el examen
CONSUMER ha analizado 99 campings, de Primera (29), Segunda (49) y Tercera categoría (21), que se hallaban operativos en junio de este año. Los técnicos de esta revista han visitado 13 campings en Barcelona, 12 en Alicante y otros tantos en Cantabria, 9 en Valencia y en Murcia, 8 en Madrid, 7 en Navarra, en Guipúzcoa y en Málaga, 6 en A Coruña, 4 en Vizcaya, tres en La Rioja y dos en Álava. Esta muestra representa casi el 30% del total (363) de campings existentes en las zonas incluidas en la investigación.
El informe estudió el precio, la seguridad y la calidad de estos campings, entendiendo por calidad exclusivamente el equipamiento y prestaciones que ofrece el camping a los usuarios y omitiendo otros aspectos importantes (pero difícilmente homologables y comparables), como el emplazamiento, el valor paisajístico, la cercanía a la costa, el acceso y los transportes…
La principal conclusión es que el 36,5% de los campings estudiados no aprueba el examen de CONSUMER, que ha partido de una ponderación que otorga el 50% de la puntuación final al equipamiento del camping, el 30% a la relación calidad-precio y el 20% a las condiciones de seguridad. Y sólo el 21% de los campings obtuvo una buena calificación, mientras que lo más común (42%) fue el aprobado raspado. Y la nota media de todos los campings se quedó en sólo 5,2 puntos sobre 10 posibles. Por zonas, los mejores se vieron en Navarra (6 puntos de media) y los peores (con una media de en torno a los 4,4 puntos) en Guipúzcoa, Cantabria y Vizcaya.
Técnicos de CONSUMER, identificándose como tales, realizaron en junio de 2002 encuestas telefónicas a los responsables de los 99 campings estudiados y solicitaron datos sobre el equipamiento del camping, las tarifas y las medidas de seguridad de sus instalaciones. Asimismo, visitaron con detenimiento cada uno de estos campings. Para elaborar el cuestionario que se cumplimentó en cada visita, se contó con la asesoría de especialistas en normativa referente a campings, y con la colaboración de técnicos en Extinción de Incendios y Prevención. Además, se realizaron entrevistas a usuarios habituales de campings y se tuvieron en cuenta recomendaciones de la Federación Española de Empresarios de Camping y Caravaning. Durante la visita, los técnicos comprobaron que los responsables de los campings no siempre facilitaron datos veraces en la encuesta telefónica.
Equipamiento, el 28% suspende
Y sólo el 29% consigue un bien, mientras que el resto, el mayor grupo (un 42%) obtiene un discreto “aceptable”. En este apartado se han valorado la amplitud del camping, los meses que permanece abierto, si dispone de piscina, bar, restaurante, supermercado, lavandería y lavadora automática para los alojados. Asimismo, el número de teléfonos a disposición del público, el despliegue de grifos, duchas, lavabos e inodoros… Además, se ha valorado el equipamiento deportivo, la adaptación a las necesidades de los discapacitados, la asistencia médica, lugar para asear a los bebés y sala de curas. También se ha comprobado si cuentan con contenedores selectivos para papel, vidrio y pilas. Por último, se ha analizado el estado de conservación y limpieza del camping, tanto del recinto en general como de sus duchas, lavabos e inodoros.
Por zonas, los campings mejor equipados se encontraban en Madrid y Alicante y los peores en Cantabria y Guipúzcoa. Respecto a las instalaciones higiénicas, los campings mejor dotados son los de La Rioja (corresponden 34 plazas de usuario a cada ducha, 22 a cada lavabo y 31 a cada inodoro), mientras que las peores proporciones se registran en los campings de Barcelona (83 personas por cada ducha, 73 por cada lavabo y 70 por inodoro). El 13% de los campings no ofrecen servicio de lavandería ni lavadora automática y el teléfono público escasea en los campings: la media es de uno por cada 319 plazas.
En una vertiente más positiva, sólo el 3% carecen de bar, y en siete de cada diez el usuario dispone de supermercado mientras que en nueve de cada diez puede dejar su vehículo en la parcela en que instala su tienda. Asimismo, el 71% cuentan con piscina y casi el 65% está equipado con alguna otra instalación deportiva, como la cancha de tenis.
En seguridad, algunas deficiencias
Todos los propietarios de los campings estudiados aseguran que cumplen la normativa, pero son muy pocos los que adoptan precauciones añadidas, como un plan de emergencia para la prevención de catástrofes o un plan detallado de evacuación. Ambos planes están implantados sólo en la mitad de los campings; la excepción positiva la protagonizan los estudiados en Alava (los dos planes, implantados en los dos visitados), y Valencia, en todos menos en uno. Se constató también, que el 14% de los campings carece de iluminación de emergencia.
El precio y la categoría, poco representativos
Otras dos conclusiones son que ni la categoría de un camping ni sus tarifas reflejan fiablemente la calidad de sus servicios y que las diferencias de precios entre unos campings y otros son espectaculares. Para comparar los precios, CONSUMER ha establecido cuatro supuestos de uso básico (véase el cuadro) de campings. Uno de ellos, el más común, es el de una pareja de adultos y un niño de cinco años que disfruta sus vacaciones la primera quincena de agosto en un camping al que llega en coche con una tienda de campaña. Se incluyen, en este cálculo, sólo el coste del alojamiento, el derecho a instalar tienda y coche, al enchufe de luz y el IVA correspondiente. Para esta familia, los campings más caros son los de Alicante, donde el precio medio para esta estancia supera los 369 euros. Tarifas sólo un poco más económicas se encontraron en Málaga, Barcelona, Vizcaya y Madrid, mientras que en los campings de Cantabria, Valencia, Murcia, Guipúzcoa y Álava, los costes se movieron, en orden decreciente, entre 308 y 282 euros. Los de A Coruña, La Rioja y Navarra fueron los más asequibles, ya que se pagaría entre 265 y 240 euros de media.
El número de campings de Primera cuyos precios, para este supuesto, oscilan entre 120 y 215 euros (los más económicos) es incluso mayor que el de campings de Segunda (teóricamente más baratos), lo que da fe de que a una mayor categoría el usuario no debe adjudicar automáticamente unos precios superiores: conviene, por tanto, preguntar las tarifas. En cuanto a la clasificación de los campings hay dos grupos de comunidades autónomas: las que establecen tres categorías (Lujo, Primera y Segunda) y las que añaden una cuarta categoría, Tercera. Así, un mismo campamento de turismo, con idénticas instalaciones y servicios podría merecer distinta categoría según la comunidad autónoma en la que esté ubicado.
Un dato que sirve para demostrar las diferencias de precios entre unos y otros campings es el siguiente: en los campings de Segunda (los que más visitantes reciben), esta familia pagaría desde 128 euros hasta 844 euros. Una diferencia de vértigo. Y la más evidente muestra de que tarifas y categorías dicen poco de la calidad de servicio (entendida siempre como equipamiento) es que el precio -esta media es ya de los cuatro supuestos de uso barajados por CONSUMER- de los 11 mejores campings en equipamiento (más de 6,5 puntos) es de 395 euros, inferior al de la media de todos los estudiados, de 442 euros. Y que de estos 11 campings seleccionados por su equipamiento sólo cuatro eran de Primera mientras que 7 eran de Segunda. Otro dato: la puntuación media en equipamiento de los 11 campings más caros (media de más de 600 euros para los cuatro supuestos de uso, y todos de Primera menos tres, de Segunda) fue de sólo 5,65 puntos sobre 10 posibles.
Los minusválidos, marginados en más de la mitad de los campings
Las deficiencias de estos alojamientos en su adaptación para las necesidades de los minusválidos han influido negativamente en las calificaciones de muchos de ellos. El 54% de los campings no cuenta con instalaciones ni accesos para discapacitados, y sólo el 5% tienen todos sus servicios adaptados. La mejor situación se ha registrado en Álava, ya que en sus dos campings se habían realizado mejoras para favorecer la estancia de estos usuarios. En Málaga y Navarra, los campings que no han adaptado ninguna de sus instalaciones suponen menos de la tercera parte. En los demás territorios, la situación fue peor, especialmente en La Rioja, donde ninguno de los visitados había realzado adaptación perceptible alguna. En Valencia, A Coruña, Barcelona Madrid y Cantabria, los campamentos que ignoran a los minusválidos representan desde el 67% hasta el 75%, mientras que la situación mejora ligeramente en Alicante y Murcia, donde en torno a la mitad de los campings habían habilitado, al menos en parte, sus instalaciones para los discapacitados.
Muchas carencias en algunos campings
En lo que se refiere a la dotación de duchas, la mejor media se registra en La Rioja (34 usuarios por cada ducha), y la peor en Barcelona, con 83 usuarios por cada una. Todos tenían agua caliente en, al menos, alguna de sus duchas.
Continuando con los servicios de aseo personal, los de La Rioja vuelven a aparecer como los campings mejor dotados en lavabos (uno por cada 22 usuarios), mientras que los de Barcelona presentan la peor proporción (73 plazas por lavabo). Destacan positivamente los campings de Valencia y Álava. En la dotación de inodoros los mejores resultados se registran otra vez en La Rioja (31 plazas para cada inodoro), y los de Barcelona y Valencia sobresalen negativamente: una media de 70 plazas por inodoro. Otra carencia es que, a pesar de que todos los campings cuentan con lavadero o fregadero, el 15% no ofrecen servicio de lavandería ni lavadora automática. Esta situación se agrava por la escasa dotación de pilones a tal efecto en los campamentos (48 plazas por cada grifo). Una proporción todavía peor se observa en A Coruña y Málaga: 71 y 72 personas, respectivamente, por cada fregadero. Asimismo, el agua caliente se echa en falta al fregar en más de uno de cada tres de los campings de Málaga, Valencia, Vizcaya, Murcia, Alicante, Cantabria, A Coruña, Barcelona y La Rioja, siendo Navarra el único territorio que cuenta con agua caliente en los fregaderos de todos los centros visitados. Mientras en Guipúzcoa este porcentaje asciende al 43% en Madrid, el 12,5% del total de los campings estudiados no ofrecen la posibilidad de fregar con agua caliente.
El teléfono público también escasea en los campings, con una media de 319 plazas por cada teléfono (518 en Madrid, la peor situación; y 200 en Álava, la mejor). Dos campings, ambos de Tercera categoría, no disponían de teléfono público.
Por otro lado, sólo dos de los 99 campings no ponen a disposición del usuario un botiquín para primeros auxilios, y dos de cada tres no ofrecen asistencia sanitaria, un servicio que puede resultar trascendental en los campamentos alejados de un centro médico. Y sólo en el 8% la asistencia sanitaria tiene un carácter permanente.
El reciclaje, una asignatura pendiente
No es habitual encontrar en los campings españoles un contenedor donde depositar por separado los residuos de papel, vidrio y pilas. Sólo uno de cada cuatro cuentan con depósitos para la recogida de papel, siendo los de Madrid y Barcelona los mejor dotados (uno de cada dos), y los de Cantabria los peor equipados: no hay contenedores para papel en ninguno de sus campings. Y la dotación de depósitos para pilas y vidrio también es escasa, sólo existe en el 21% y 42% de los campings, respectivamente. Los de Valencia destacan negativamente porque en ninguno de los inspeccionados se ofrece al usuario la posibilidad de separar el vidrio. En cuanto al reciclaje de pilas, Valencia, Málaga y La Rioja no poseen en ninguno de los campings analizados recipientes para este material.
En orden decreciente, los diez campings con mejor relación calidad-precio (todos ellos han aprobado holgadamente el apartado de seguridad) según los criterios barajados por CONSUMER son:
- LAGO COTO CISNEROS, Segunda categoría, en Chinchón (Madrid)
- INTERNACIONAL LAS PALMERAS, Primera categoría, en Crevillente (Alicante)
- EL SUR, Segunda categoría, en Ronda (Málaga)
- ETXARRI, Segunda categoría, en Etxarri-Aranatz (Navarra)
- ISKIBI, Tercera categoría, en Goizueta (Navarra)
- SANTA MARTA, Primera categoría, en A Coruña
- ANGOSTO, Segunda categoría, en Villañane (Álava)
- EL CHORRO, Tercera categoría, en Álora (Málaga)
- EL TEULARET, Primera categoría, en Engrera (Valencia)
- MARIOLA, Segunda categoría, en Bocairent (Valencia)
Seguridad: puede mejorar mucho y tablas comparativas
Todos los centros estudiados aseguran cumplir la normativa en esta materia. Asesorados por especialistas en seguridad, técnicos de CONSUMER efectuaron una consulta en los 99 campings, cuyo resultado fue que en Álava, Navarra, Valencia y A Coruña todos en las dos primeras y todos menos uno en las dos restantes contaban con un plan de emergencia (en una media general, sólo lo tienen implantado el 57% de estos recintos). El resultado fue poco satisfactorio en Guipúzcoa y La Rioja (ninguno de los campings lo tenía), y en Madrid, Cantabria y Vizcaya (uno de cada tres en Madrid y uno de cada dos en Cantabria y Vizcaya dispone de un plan de emergencia). Es más tranquilizador el número de campings que cuentan con un plan de evacuación (74% del total), destacando los de Valencia y Alava como los más previsores en este sentido ya que la totalidad de los estudiados en estas dos zonas despliegan este plan, mientras que en Murcia, Barcelona, Alicante, A Coruña y Madrid se comprobó en una proporción de entre el 88% y el 83%. La nota negativa la ponen los campings de Málaga y Guipúzcoa, donde seis de cada diez no son previsores en este sentido y los de Cantabria donde tan sólo la mitad han elaborado un plan de evacuación.
Si se produce un incendio, extintores (los había en todos los campings, excepto en uno de Cantabria donde se vieron tan sólo en la zona de aseos) y tomas de agua facilitan la labor de los bomberos. Todos los de Navarra y Álava cuentan con tomas de agua, y las hay en tres de cada cuatro centros del resto de zonas, con la excepción de Alicante, Cantabria, Barcelona y La Rioja (donde se pueden ver en dos de cada tres campamentos) y Valencia, Murcia, Navarra y A Coruña, donde las tomas de agua se hallan visibles en sólo la mitad de los campings visitados. Por otra parte, la iluminación de emergencia deviene importante cuando el problema de seguridad se produce de noche. El 14% de los campings carece de este sistema de prevención. Ya en otros aspectos examinados, dos campings de Navarra, y uno en Murcia, Barcelona, Alicante y Cantabria no se encontraban cerrados en todo su perímetro aunque lo obligue la norma, y sólo uno de Guipúzcoa y dos de Cantabria no ofrecen servicio de vigilancia. Y únicamente en el 66% de los campings se informa a los usuarios de las medidas para casos de urgencia o alarma. Ya en lo positivo, en el 95% de los campings se vio el cableado eléctrico enterrado, tal y como procede.
Se analizaron 99 campings (29 de 1ª categoría, 49 de 2ª categoría y 21 de 3ª categoría en trece provincias):
- ocho en Madrid (tres de 1ª y cinco de 2ª
- siete en Navarra (uno de 1ª, cinco de 2ª y uno de 3ª)
- cuatro en Vizcaya (uno de 1ª, uno de 2ª y dos de 3ª)
- nueve en Murcia (dos de 1ª categoría y siete de 2ª)
- 13 en Barcelona (cuatro de 1ª, tres de 2ª y 6 de 3ª)
- nueve en Valencia (tres de 1ª y seis de 2ª)
- siete en Guipúzcoa (uno de 1ª, tres de 2ª y tres de 3ª)
- tres en La Rioja (uno de 1ª, otro de 2ª y otro de 3ª)
- dos en Álava (uno de 2ª y otro de 3ª)
- siete en Málaga (dos de 1ª, cuatro de 2ª y uno de 3ª)
- 12 en Alicante (cuatro de 1ª y ocho de 2ª)
- 12 en Cantabria (cinco de 1ª, cuatro de 2ª y dos de 3ª)
- y seis en A Coruña (dos de 1ª, uno de 2ª y tres de 3ª categoría)