Mensajería instantánea

Del placer a los negocios

La amplia aceptación de la mensajería instantánea entre grupos de amigos cala también en el ámbito laboral
1 octubre de 2002
Img internet

Del placer a los negocios

Utilizar un programa de mensajería instantánea equipara encender el ordenador con bajar al bar donde se reúnen los amigos. A diferencia de las conversaciones textuales convencionales, los programas de mensajería no están diseñados para hablar con desconocidos, sino para reunirse con familiares, amigos o compañeros de trabajo. A grandes rasgos, estas aplicaciones son chats donde sólo es posible conversar con gente que nos haya permitido expresamente hacerlo (o con personas a las que se lo hayamos permitido nosotros mismos).

Su funcionamiento es muy simple: el usuario instala en su equipo un pequeño programa en el que incluye el nombre de los amigos que cuenten con el mismo sistema, esto es, añade a su lista de “colegas” a los compañeros que también estén dados de alta en el mismo servicio. A partir de entonces, una alarma le indicará cuando una de esas personas se haya conectado a Internet. Entonces podrá saludarla y dialogar con ella como si de un chat convencional se tratara. ¿Y si esa persona no quiere que le molesten porque está muy atareada? Tiene dos opciones, cambiar su estado de “disponible” a “ocupado”, o, la más expeditiva: entrar de forma invisible. Así, ninguna de sus amistades verá siquiera que se ha conectado a Internet.

Aislados entre sí

Los programas de mensajería son variados y, lo que es peor, incompatibles entre sí. Los usuarios de uno no pueden hablar con los del otro, lo que obliga a los internautas a utilizar no el mejor, sino el más extendido entre sus conocidos o a mantener varios permanentemente abiertos. Los grandes portales (AOL, MSN, Yahoo…) tienen el suyo que utilizan para fidelizar a los internautas con servicios añadidos a los propios de este sistema. Esto ha motivado que la línea entre chat y mensajería (tan clara en un principio) cada vez esté más difusa, ya que aplicaciones como MSN Messenger permiten acceder a salas de chat en las que encontrar gente nueva, aunque no es ahí donde mejor se desenvuelven estas aplicaciones.

Bien utilizada, la mensajería instantánea se sitúa a medio camino entre el teléfono y el correo electrónico

De ser una herramienta propia de adolescentes, estos programas se han demostrado como una valiosa herramienta de trabajo. La mensajería instantánea es una de esas tecnologías que los empresarios temen casi tanto como adoran. Bien utilizada se sitúa a medio camino entre el teléfono y el correo electrónico, aportando lo mejor de ambos sistemas: es aún más inmediato que el teléfono sin por ello obligar a la otra persona a abandonar súbitamente sus quehaceres. Funciona como un medio de comunicación ágil y poco costoso para unir equipos de trabajo distantes. Por otro lado, se corre el peligro de tener a los empleados entretenidos durante horas con familiares y amigos.

Los programas de mensajería poco tienen ya que ver con los que empezaron a popularizarse hace cinco años. Hoy, además de permitir las consabidas idas y venidas de notas textuales, incorporan opciones para enviar y recibir archivos, conocer la previsión meteorológica, leer los titulares del día o enviar un sonoro beso al interlocutor.

Mirando al futuro

Pero donde más se esfuerzan en avanzar estos programas es en sus posibilidades multimedia. La mayoría de ellos permiten hablar con cualquier compañero a través del micrófono y escuchar por los altavoces del ordenador como si se tratase de un teléfono. ¿El precio? El mismo que la propia conexión, aunque la llamada sea a Nueva Zelanda. ¿El inconveniente? Que nadie espere una calidad parecida al teléfono, ya que son habituales retardos desesperantes que hacen imposible la conexión. Lo mismo ocurre con el uso de cámaras de vídeo (webcams), cuya imagen, a menudo, llega a saltos varios segundos después de haber sido captada.

No es difícil imaginar un futuro cercano en el que los programas de mensajería instantánea salgan del computador de sobremesa y sean incorporados a ordenadores de mano (PDAs), teléfonos móviles o radios de coche conectados permanentemente a Internet. Así, será posible conocer en todo momento quién anda ahí, y dejar recados digitales a quien deseemos.

Navegar a la carta
  • MSN Messenger
    www.msn.es
    Si Windows, que es el sistema operativo que mueve a la inmensa mayoría de ordenadores domésticos, incluye de forma indisoluble desde hace un par de años su propio programa de mensajería, no es de extrañar que éste sea uno de los más utilizados. Carece de herramientas tan útiles como el almacenaje de comunicaciones recibidas cuando estamos desconectados. Además, el mensaje personal no aparece al lado del nombre, sino que lo oculta. A cambio, ofrece muchos servicios extra, como el envío de mensajes cortos a móviles.
  • Yahoo! Messenger
    www.yahoo.es
    El Messenger de Yahoo! es uno de los más completos y extendidos. Además de los consabidos envío y recepción de archivos y la capacidad multimedia de audio y vídeo, incluye noticias, cotizaciones bursátiles y previsiones meteorológicas de todo el mundo. Los usuarios que utilicen el correo electrónico de Yahoo! reciben un aviso cada vez que llega un nuevo mensaje, evitándose la molestia de entrar periódicamente en la cuenta para comprobarlo.
  • ICQ
    www.icq.com
    ICQ Se pronuncia I seek you, o, lo que es lo mismo, te busco. Fue la primera aplicación de mensajería instantánea y en ella se inspiró el resto de contendientes en liza. Al igual que AOL Messenger es también propiedad de America Online, que los distribuye por separado e incompatibles entre sí. Incluye opciones curiosas ya en desuso en otros sistemas que agilizan la conversación a cambio de provocar situaciones comprometidas: envía cada carácter tecleado, en vez de remitir la frase entera, con lo que los errores quedan al descubierto. Incorpora múltiples funciones que lo convierten en un devorador de recursos del sistema.
  • Jabber
    www.jabbercentral.com
    Jabber es una tecnología, no un programa, por lo que no hay una versión oficial, sino múltiples implementaciones del protocolo original hechas por programadores desinteresados. ¿Esto qué quiere decir? Hay varias versiones para cada plataforma (Macintosh, Linux, Windows, Java…) que se encuentran en diferentes fases de desarrollo: las hay que priman las novedades, mientras que otras buscan la estabilidad. La principal virtud de Jabber es que permite conversar con usuarios de otros sistemas desde el mismo programa. Winjab es la versión más conocida para Windows, mientras que Everybuddy lo es para Linux.
  • AOL Messenger
    www.aol.com
    En España apenas es conocido, pero en EEUU donde America Online tiene una jugosa cuota de mercado de acceso a Internet, el messenger de AOL es uno de los más utilizados. Tiene una versión web más lenta e incómoda, pero que solventará más de un apuro si necesitamos usar el sistema desde un ordenador ajeno que no lo tiene instalado.