Cuando el calor aprieta...
Los aparatos de aire acondicionado se han convertido en la estrella del verano. Con la llegada de los calores estivales, funcionan a pleno rendimiento y son capaces de transformar el aire cálido de una habitación en un agradable frescor. Aunque ya lo conocían los antiguos sirios hace 6.000 años, el aire acondicionado sólo tiene un siglo de uso masivo. En España, un país con muchas zonas de temperaturas extremas, poco más de 620.000 viviendas, un 6% del total, disponían de algún sistema de refrigeración en 1990. Esta proporción se ha multiplicado por tres en diez años. En 2001, según el Instituto Nacional de Estadística, más de 2,2 millones de hogares utilizados como primera residencia ya contaban con aire acondicionado.
Además, esta tendencia continúa creciendo. Las altas temperaturas registradas en nuestro país estos dos últimos años han provocado que las ventas se hayan disparado hasta tal punto que en 2004 los fabricantes de equipos de climatización y aire acondicionado facturaron más de 1.472 millones de euros. En julio de 2003, la lista de espera para instalar un climatizador llegó, en algunos casos, a las seis semanas. Levante, Murcia y Madrid son las zonas en la que más se ha disparado el consumo. Nueve de cada 10 aparatos adquiridos también incorporan calefacción, las llamadas bombas de calor, y casi la mitad cuestan menos de 600 euros.
En cuanto a la temperatura adecuada para una vivienda, los especialistas aseguran que, considerando la capacidad de adaptación del cuerpo a las condiciones climáticas y que en los meses de más calor vestimos prendas más ligeras, una temperatura de entre 21 y 25 grados es más que suficiente para sentirse cómodo en casa.
Tipos de aparatos
- Sistema split (dividido, en inglés).
Estos aparatos presentan dos unidades: el compresor, que se instala fuera de la vivienda (en el balcón o fachada, por ejemplo) y evaporador, que va dentro. Ambas partes están unidas por dos tubos. - Mural split
Indicado: Para climatizar una sola estancia
Resulta económico cuando se quiere tener aire acondicionado o calefacción en una sola habitación
Precio: Entre 300 y 1000 Euros - De suelo o techo
Indicado: Si existen radiadores en la habitaciones y o hay espacio para colocar unidades en el suelo o algún impedimiento en las partes altas.
Precio: Entre 1500 y 2000 Euros - Vertical
Indicado: Estancias con grandes necesidades de refrigeración debido a su gran potencia.
Precio: Entre 500 y 2500 Euros - Sistema multi-split.
Se diferencia del split en que consta de más de una unidad interior, de modo que cada una se coloca en una estancia distinta. Adecuado para viviendas grandes en las que una sola unidad interior se queda corta.
Indicado: Para climarizar habitaciones de forma independiente. Recomendable en casas de más de 100 m2 y en la unifamiliares ubicadas en zonas muy clurosas
Ventajas: No tienen que funcionar todas las partes a la vez
Precio: Entre 90 y 1200 Euros (2 uds) entre 1400 y 1800 euros (3 uds). - Climatizador de ventana
Unitario y compacto. Se instala en una ventana o muro exterior, quedando medio equipo fuera, y el otro medio dentro. Poseen en una misma unidad el compresor, ventilador, evaporador… lo que produce ciertas desventajas en cuanto a aspectos estéticos y del nivel sonoro que genera en el interior de la vivienda.
Indicado: Para viviendas donde no está permitida la colocación de unidades condensadoras en la fachada. Para casetas de obra y casas prefabricadas.
Ventajas: Sencilla instalación económico
Precio: Entre 400 y 700 euros.
- Split portátil:
El compresor también debe colocarse fuera, pero no se fija, puede dejarse en el suelo de un balcón, por ejemplo. Este aparato puede transportarse y utilizarse en distintas estancias siempre y cuando las habitaciones tengan puertas o ventanas con salida al exterior. - Sistema monobloc:
Sólo consta de unidad interior, no tiene ninguna parte para colocar fuera. Expulsa el aire caliente mediante un tubo, lo que significa que para su funcionamiento debemos tener una ventana o puerta ligeramente abierta, de modo que el tubo pueda salir fuera. Es más cómodo y económico que el split portátil, pero también es el que menos enfría porque su potencia es inferior. - Monobloc portátil
Indicado: Para viviendas de alquiler o para segundas viviendas. También aconsejable cuando la complejidad de la instalación hace inviable otro tipo de aire.
Ventajas: No necesita instalación y es fácil de transportar. Acceso fácil a los filtros.
Desventajas: Tienen la desventaja de producir un ruido excesivo al introducir el compresor (en el caso del split portátil) dentro de la vivienda. La gama de potencias es limitada y consume mucha energía.
Precio: Entre 500 y 800 euros.
Sistema Invertir
Esta nueva tecnología, que ya incluyen de serie muchos aparatos, mejora los sistemas de climatización tradicionales. A diferencia de estos últimos, que repiten continuamente los ciclos de arranque-paro para ajustar la temperatura, la tecnología Inverter permite mantener de forma constante la temperatura seleccionada previamente, y consumir únicamente la energía que necesita para alcanzarla. Para ello, reduce o aumenta la potencia frigorífica a la salida del aparato, en función de la temperatura necesaria en cada momento, sin tener que conectar y desconectar el compresor. El resultado es un mayor confort y un menor gasto (hasta un 25% ahorro respecto a los sistemas tradicionales). Se evitan las subidas y bajadas de temperatura en la habitación y se optimiza el consumo, aumentando también la vida útil del aparato de aire acondicionado al reducir el número de puestas en marchas y paro del condensador. Además, estos aparatos ofrecen un bajo nivel sonoro y una mejor distribución del aire, mejorando así las condiciones de salud e higiene en el ambiente. Por lo que respecta al precio, los equipos de aire acondicionado que incorporan el sistema Inverter son más caros que los tradicionales, unos 180 euros más, pero, como ya hemos visto, consumen menos.
Bomba de calor
Es la opción para quien necesita un aparato de aire acondicionado en verano y un sistema de calefacción en invierno. Aunque la inversión inicial resulte en torno a un 25% superior a la de otros aparatos de aire acondicionado, se puede amortizar en poco tiempo ya que permiten alcanzar unos ahorros energéticos en torno al 30-40%.
La gran ventaja de la bomba de calor reside en su eficiencia energética en calefacción, puesto que es capaz de aportar más energía que la que consume, aproximadamente entre 2 y 3 veces más. Esto es así porque el equipo recupera energía gratuita del ambiente exterior y la incorpora como energía útil para calefacción. Los modelos que podemos encontrar son de gran variedad, como los modelos de ventana, los portátiles que se pueden transportar de un lugar a otro, las consolas compactas de aspecto estético y elegante, o los equipos “multi-split” que son más decorativos, permiten regular de forma distinta cada habitación y aprovechan mejor la potencia contratada.
Es importante contar con el permiso de la comunidad de vecinos para instalar el compresor fuera, y en cuanto a la parte que va dentro de la casa, debemos estar dispuestos a agujerear paredes por las que deben discurrir los tubos, aunque se disimulan con canaletas. Un inconveniente de estos aparatos es que en regiones muy cálidas en las que el compresor permanece en contacto con temperaturas muy altas, las averías son más frecuentes, pues debe realizar mucho más trabajo. Otro aspecto importante: la instalación del aire acondicionado, excepto el de aparatos portátiles, requiere de los servicios de un albañil, que realizará la obra necesaria para la colocación de los tubos, y de un profesional que conectará el aparato. Los establecimientos que venden estos electrodomésticos ponen en contacto a sus clientes con personal especializado en este tipo de instalaciones, pero no está de más asegurarse de que realmente son expertos. Además, el coste que hay que añadir al precio del aparato supone, de media, unos 300 euros, cantidad muy a tener en cuenta en el presupuesto disponible.
- Realice la compra con suficiente antelación. Es probable que a partir de julio y, sobre todo, en agosto, el mercado esté saturado y no se puedan instalar todos los aparatos que se compren. Además, cuanto más tarde se adquiera, es más probable que los precios suban.
- A la hora de elegir entre un equipo u otro, tenga en cuenta la zona climática en la que vive, las dimensiones de la vivienda, la orientación de las paredes, el número de personas que habitan la casa, el aislamiento de su vivienda, etc.
- Calcule sus necesidades. Si va a necesitar calefacción durante el invierno, puede que sea mejor comprar un equipo de aire acondicionado con bomba de calor. Será más económico.
- Intente que un técnico visite el lugar en el que se ha de instalar el aparato antes de la compra para conocer exactamente las posibilidades de instalación del mismo y que le aconseje sobre la cantidad de frigorías y el aparato más conveniente.
- Compare precios. No se conforme con la primera oferta. Solicite toda la información por escrito para conocer todo lo que incluye el precio y en caso de incumplimiento poder realizar la reclamación correspondiente.
- Sepa de antemano todos los detalles y características del aparato, así como los de su instalación, y si el IVA está incluido en el precio final.
- No elija aparatos más grandes ni más potentes de lo que necesita. Estará tirando dinero y malgastando energía.
- Asegúrese de que el modelo elegido tiene termostato con lectura numérica de temperatura y sensores de ambiente con programador de tiempos y temperaturas. Un grado más de frío puede implicar un 8% más de consumo.
- No olvide que los aparatos tienen que ser instalados por profesionales. Pida presupuesto de instalación. El coste de ésta depende de varios factores, como la zona donde el aparato se va a instalar, la distancia entre las zonas de instalación, si sólo es necesario hacer agujeros o hay que hacer obras de más envergadura, entre otros.
- Exija una factura detallada para no tener problemas ante cualquier posible reclamación. Si la instalación no está incluida, pida otra factura a los instaladores.
- A la hora de comprar un aparato de aire acondicionado, tenga en cuenta que, para el mismo nivel de prestaciones, hay aparatos que consumen hasta un 60% más de electricidad que otros.
- Un aparato de aire acondicionado de 3.000 frigorías/hora que funciona constantemente durante una hora consume alrededor de 1’4 kWh, lo que equivale, aproximadamente, a 0’08 euros. Una plancha consume casi el doble.
- Instale la unidad exterior en las fachadas norte o en patios sombríos. Protéjala de la luz solar directa instalando un tejadillo por encima.
- Procure que no quede muy separada la unidad exterior de la interior porque cuanto mayor sea la distancia, mayor será el consumo.
- Evite que los electrodomésticos que generan calor se encuentren en las habitaciones refrigeradas y que el termostato esté próximo a focos de calor como bombillas, radiación solar, etc.
- Regule el termostato del aire acondicionado a 25º C como máximo. Cada grado que disminuya la temperatura, aumentará el consumo de energía un 8%, pero no el confort. Además, las dolencias pulmonares y de garganta por la adaptación a ambientes muy contrastados de temperatura están más que demostradas.
- En cualquier caso, una diferencia de temperatura con el exterior superior a 12ºC no es saludable.
- Para dormir es suficiente una temperatura entre los 15º y los 17º C, aunque los niños y personas mayores pueden necesitar algo más.
- Instale un termostato si su aparato de aire acondicionado no lo tiene incorporado o si no proporciona información precisa sobre la temperatura.
- Apague el aparato de aire acondicionado unos minutos antes de irse a la cama, la sensación térmica perdurará durante un tiempo por la inercia térmica del ambiente y no consumirá energía. Por la mañana no lo encienda hasta que la casa esté ventilada.
- Cuando el calor apriete, cierre las ventanas expuestas a la luz solar directa, con persianas o contraventanas. Ahorrará hasta un 30% de energía y conseguirá un ambiente agradable en menos tiempo.
- Con la instalación de toldos y acristalamientos adecuados, así como aislando adecuadamente los muros y techos, también puede tener un ahorro energético de más de un 30%.
- No deje las puertas y ventanas abiertas, el aparato estará trabajando constantemente y el consumo será mayor.
- En verano, procure tener la casa en penumbra durante el día (sin que exija encender las luces). Igualmente, es conveniente instalar toldos y persianas en el exterior y cortinas y/o visillos en el interior. Impiden las radiaciones directas del sol y disminuyen las necesidades de refrigeración.
- Limpie regularmente los filtros (cada dos semanas). Un filtro sucio, además de empeorar la calidad del aire, aumenta el consumo.