Dejar la casa vacía en vacaciones

Con la llegada del verano, muchas casas se quedan vacías, y el gremio de los amigos de lo ajeno intensifica su actividad.
1 julio de 1998
Img consejos listado

Dejar la casa vacía en vacaciones

  • Evite signos que delaten la ausencia del domicilio. No baje totalmente las persianas. Impida que se acumule la correspondencia en el buzón, pida a una persona de confianza que se la recoja regularmente.
  • Deje todos los accesos a la vivienda perfectamente cerrados. La puerta principal, los patios interiores, ventanas y balcones son los puntos débiles de una casa.
  • En el caso de ventanas bajas o situadas junto a ventanas o azoteas, lo más práctico y económico son las rejas. Si su presupuesto se lo permite, puede instalar cristales anti-rotura o persianas de aluminio reforzadas con mecanismos de seguridad.
  • Haga creer a los cacos que la casa está habitada. En el mercado encontrará temporizadores y programadores que conectados a los aparatos de música y lámparas, se pondrán en marcha, consiguiendo que la casa parezca habitada. Tampoco está de más dejar algo de ropa tendida.
  • No deje las llaves bajo el felpudo ni en ningún escondite “secreto”. Los ladrones se las saben todas, y pueden haber vigilado sus costumbres.
  • No difunda sus planes. Comente sus proyectos sólo a las personas de confianza
  • No deje mensajes en el contestador informando de su ausencia.
  • Facilite su dirección y teléfono de contacto a algún vecino de confianza para que pueda avisarle ante cualquier eventualidad.
  • Ponga a buen recaudo sus bienes. No deje objetos de valor ni dinero dentro de casa; deposítelos, en su caso, en la caja fuerte de un banco.
  • Haga un inventario de los objetos de valor. Desde electrodomésticos hasta joyas. Detalle sus características (marca, modelo, número de serie…). Grabe su número de DNI en los objetos más valiosos. No estaría de más hacer fotografías de los mismos; en caso de robo, facilitará su identificación.

Seguridad “extra”

En el mercado se puede encontrar:

  • Puertas blindadas, desde 90.000 pesetas. Cerraduras de seguridad electrónicas, con teclado de control de acceso que incluye código secreto de entrada. Desde 15.000 ptas.
  • Alarmas. Desde 39.000 ptas. Las más seguras son las conectadas las 24 horas a un servicio de seguridad o a una Central Receptora de Alarmas. Abono anual, desde 26.000 pesetas. Puede incluir custodia de llaves, patrullas móviles…
  • Detectores volumétricos. Advierten el movimiento y se instalan en cualquier lugar de la casa. Se disparan creando falsas alarmas. Desde 7.000 ptas.
  • Detectores de infrarrojos. Avisan de la presencia de intrusos gracias a las variaciones de temperatura o a las radiaciones. Desde 7.000 ptas. Detectores magnéticos. Instalados en puertas y ventanas, hacen saltar la alarma cuando alguien atraviesa el campo magnético señalado. A partir de 7.000 ptas.

Precauciones ante otros peligros

  • Cierre las llaves de paso del agua y del gas. Compruebe que quedan cerrados todos los grifos y aparatos de gas, evitará problemas al restablecer el suministro.
  • Desconecte los aparatos eléctricos que no necesiten quedarse funcionando. Corte la corriente de todos los lugares que pueda
  • Asegúrese de que durante su ausencia no quede impagada alguna factura (luz, teléfono, agua, gas,…). A la vuelta de sus vacaciones puede encontrarse con el suministro cortado.