Jugar en Bolsa
Antes de tomar la decisión de invertir un dinero, hemos de definir si lo hacemos en renta fija a corto plazo, renta fija a largo plazo (Bonos u Obligaciones) o renta variable (acciones en la Bolsa). Según nuestra afición al riesgo y la cantidad que pensamos invertir, elegiremos una u otra o las tres combinadas. Si se decide a jugar en Bolsa, ahí van unos consejos muy útiles.
Históricamente y según estudios contrastados que defienden los especialistas, parece estar comprobado estadísticamente que la bolsa sube, a la larga, más de lo que baja. Por ello, la renta variable es una buena inversión siempre que se haga a largo plazo. A pesar de lo dicho, es habitual que tras un periodo alcista continuado el recorte coja por sorpresa a muchos inversores.
- Sea consciente del nivel de riesgo que está dispuesto a asumir. No olvide que en Bolsa se pierde o se gana sólo en el momento en que se vende la acción. Si no se vende, no se ha ganado nada.
- Como nadie sabe cuando va a ocurrir la próxima caída, las inversiones deben plantearse a largo plazo.
- El índice bursátil, por ejemplo el IBEX 35, refleja el precio al que se están intercambiando las acciones incluidas en ese índice. Así, el IBEX 35 indica la variación de los precios de las 35 compañías más líquidas de entre las que cotizan en Bolsa en España.
- Tenga en cuenta que el precio al que cotiza una acción no recoge sólo la información conocida que influye en ese precio, sino que también está asumiendo lo que los inversores estiman que pueda pasar en el futuro con esa acción.
- Las variaciones en las cotizaciones se deben al desfase entre lo que prevé el mercado (lo que piensan los inversores) y los hechos que se producen o lo que pueda suceder en el futuro.
- Las circunstancias que producen impacto positivo en la Bolsa son: inflación baja o con tendencia a la baja, tipos de interés bajos, crecimiento del beneficio de las empresas y estabilidad política.
- Las que provocan efecto negativo son: inflación alta, tipos de interés altos, malos resultados empresariales e inestabilidad política.
- Es muy difícil intuir cuando termina un ciclo (alza-baja-alza…) y comienza otro.
- Invierta a largo plazo: la inversión a corto supone mucho riesgo. Cuanto más tiempo se mantenga una acción en la cartera, disminuye el riesgo de perder el dinero. Y aumenta la posibilidad de obtener una rentabilidad cercana a la media de ese valor.
- De invertir en Bolsa, hágalo con el dinero que no necesitará en, al menos, cinco años.
- Márquese, para sus acciones, un precio objetivo con la rentabilidad que desea. Y venda cuando la haya alcanzado. No retrase esa venta, no se deje llevar por el ansia de ganar más.
- Un modo de superar el dilema de si es el momento idóneo para entrar en Bolsa: invertir con cierta periodicidad una cantidad concreta (siempre la misma) de dinero. Así, se compran acciones con un precio razonable (pocas cuando están altas y muchas cuando están bajas).
- No invierta mucho dinero en un número reducido de valores. Diversificar la cartera de acciones hace disminuir el riesgo. Valores hoy sólidos pueden no serlo el año que viene.
- Es recomendable invertir en Bolsa mediante Fondos de Inversión: además de conseguir una gestión profesional de su dinero por poco coste, accederá a una cartera bien diversificada tanto en sectores como en países. Los Fondos de Inversión tiene un tratamiento fiscal favorable, así la rentabilidad financiero-fiscal es óptima.