Generamos menos basura aunque los ayuntamientos facilitan poca información sobre su gestión
Tirar un papel o un plástico a la basura parece un acto de poca importancia. Sin embargo, implica un posterior proceso de recogida, tratamiento y recuperación que conlleva mucho tiempo y, sobre todo, dinero. Pero ante todo supone un grave riesgo para el medio ambiente. Y más en un país como el nuestro que ocupa la sexta posición en el ranking europeo de países que más residuos urbanos generan. Para afrontar esta situación, las administraciones europea, estatal, autonómica y municipal han elaborado una larga serie de normas. En España, destacan la nueva Ley de residuos y suelos contaminados del 11 de marzo de 2011 que pretende promover la reutilización, el reciclaje u otras formas de valorización y el II Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, PNIR (continuación del Plan Nacional de Residuos Urbanos, PNRU), aplicable hasta 2015. Según este documento, el Ministerio de Medio Ambiente se propone reciclar, para el año que viene, el 80% del vidrio, el 75% de papel y cartón, además del 50% de los plásticos, entre otros objetivos.
Para tratar de comprobar si esos porcentajes se cumplen, o al menos se aspira a cumplirlos, EROSKI CONSUMER ha estudiado los sistemas de recogida y gestión de los residuos urbanos de 18 ciudades españolas: A Coruña, Alicante, Barcelona, Bilbao, Granada, Logroño, Madrid, Murcia, Málaga, Oviedo, Pamplona, San Sebastián, Sevilla, Valencia, Valladolid, Vitoria y Zaragoza. Córdoba aparece en todos los cuadros con datos no facilitados ya que, pese a las reiteradas peticiones por parte de esta revista, no proporcionó los datos para este reportaje.
Si en 2009, cuando se publicó un informe similar, la tendencia en la generación de basura se mantenía al alza (se produjo un 4% más de basura en relación a los datos publicados por esta revista en 2004); ahora sucede justo lo contrario. Poco a poco nos vamos acercando a los objetivos contemplados en el Plan Nacional Integrado sobre Residuos Urbanos (PNIR), aunque todavía queda un largo camino por recorrer. En comparación con los datos facilitados en 2008, en la actualidad la producción de basura ha descendido un 4%.
Se comprobó también que la mayoría de las ciudades estudiadas cuentan con el número de contenedores de recogida selectiva mínimo exigido por el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos: un recipiente de vidrio por cada 500 habitantes, uno de papel-cartón por cada 500 ciudadanos y uno de envases por cada 300 vecinos.
Si para facilitar la información del número de contenedores de los que se disponen, los Ayuntamientos apenas presentan reticencias, no ocurre lo mismo con los porcentajes de residuos que recuperan del total recogido: pese a la insistencia de esta revista, solo la mitad de las ciudades facilitó este dato. Es entonces, cuando un vecino de estas capitales puede preguntarse si realmente sirve el esfuerzo que realiza en su casa separando los tipos de residuos si, finalmente, desconoce cuánta de esa basura que genera se recicla o recupera.
¿Cuánta basura generamos?
El año pasado se generaron casi 5 millones de toneladas de residuos urbanos, un 4% menos que en 2008. Madrid es la ciudad que más basura produjo, en concreto 1.470.461 toneladas, aunque un 7,5% menos que los residuos recogidos en 2008, tal y como se publicaba en el informe de hace dos años. Una cifra que nada tiene que ver con la de Logroño, 56.059 toneladas (un 11% menos que en 2008). La capital riojana repite como la capital donde menor fue el número de residuos urbanos recogidos.
Si nos detenemos en la evolución en cada una de las capitales analizadas, solo tres de ellas han aumentado la cantidad de residuos en comparación con 2008: Granada, Málaga y Vitoria con incrementos de un 13%, un 3% y un 2%, respectivamente. Entre las que han reducido el monto de basura, destacan de forma más que positiva, Valladolid (-7%), Madrid (-8%), Valencia (-8%), San Sebastián (-9%), Bilbao (un 10% menos de basura recogida en 2010), y de forma más que significativa Logroño y Alicante (-11%).
Otro indicador muy valioso es conocer la cantidad de kilogramos de basura que genera cada habitante por año y día. Mientras en 2008 se generaron 1,32 kg por habitante y día, en 2010, esa cifra se ha reducido hasta los 1,24 kg. Muy por encima de esta media actual, se sitúan las cifras de Barcelona (1,43 kg por habitante y día), Málaga (1,52) y Granada (1,58). Pamplona, Oviedo, Vitoria, Valladolid, Zaragoza, y Logroño obtienen los menores índices (entre 1,16 y 1,01 kg por habitante y día). El resto de ciudades se mantiene en los valores medios. Son datos esperanzadores: prácticamente la totalidad muestra un descenso de la cantidad de desperdicios generados por vecino y día, aún cuando la tendencia general es que la población haya aumentado en las ciudades analizadas.
Retrato de una bolsa
Los Residuos Sólidos Urbanos (RSU) se generan en los núcleos urbanos, tanto en los domicilios particulares como en los comercios y las oficinas. Sin embargo, es precisamente en casa donde la sociedad crea la mayor parte de la basura. Salvo en cuatro ciudades donde no facilitaron este dato, en el resto los residuos domiciliarios supusieron de media el 87% del total de la basura urbana generada el pasado año.
Según el Plan Integral de Residuos Urbanos, la bolsa de residuos está formada en su mayoría por materia orgánica (un 44% aproximadamente corresponden a restos de comida y de jardín), papel y cartón (un 21% del contenido total), plástico (un 11%) y vidrio (un 7% del total de residuos urbanos). No obstante, la bolsa de basura de las ciudades estudiadas es diferente: está compuesta en un 29% por materia orgánica, en un 11% por papel-cartón y por algo menos de un 5% en los casos de envases y vidrios. Para recoger esos desperdicios, los contenedores siguen siendo la opción más extendida en todas las ciudades. Destaca, sin embargo, el caso de Oviedo, donde el sistema implantado para tal fin es el de la recogida selectiva en los propios portales de las viviendas. Además, poco a poco se van extendiendo otros métodos para depositar la basura como la recogida neumática (conductos subterráneos que mediante aspiración llevan la basura hasta un centro donde se recogen) muy presente en Barcelona, Bilbao, San Sebastián, Sevilla, Vitoria y Zaragoza.
El final de la tarde, entre las 20.00 y las 21.00 horas, es el horario escogido por la mayoría de los Ayuntamientos para que los vecinos depositen su basura. Únicamente se han encontrado dos peculiaridades: Pamplona, donde hay libertad horaria para depositar la basura, excepto en el caso del vidrio que no se puede dejar entre las 22.00 y 08.00 horas; San Sebastián, donde el depósito en las calles del centro histórico únicamente se puede hacer de 21.30 a 22.00 horas y durante todo el día para recogida neumática.
EROSKI CONSUMER quiso saber, a través de una encuesta a los usuarios de su página web, el grado de compromiso en materia de reciclaje de los ciudadanos. En total, más de 2.620 personas participaron. Tres de cada diez participantes procedían de Cataluña (casi un 16% del total) y de Madrid (poco más del 14%). País Vasco era la tercera comunidad autónoma donde más lectores participaron (casi un 13%), seguida de la Comunidad Valenciana (un 12%) y de Andalucía (un 11%).
El reciclaje es una lección aprendida e interiorizada en la mayoría de los casos. Y es que nueve de cada diez personas confirmaron que habitualmente separan sus residuos. Alrededor del 90% de los consultados reconocía reciclar el papel y el cartón, los envases y las pilas (más de un 85%), y los plásticos (casi un 80%). Llama la atención que, aunque algunas ciudades aún no han instalado un sistema de recogida selectiva de la materia orgánica, un 73% de los participantes de la encuesta asegura separar este tipo de residuos del resto de su basura. Por el contrario, aunque con altas proporciones, lo que menos se recicla son los aceites (un 64% sí lo hace) y los medicamentos (un 72%).
En este sentido, tirar cada tipo de residuo en su recipiente es un acto que, para tres de cada cuatro personas consultadas, es muy sencillo. Sin embargo, el otro 25% lo considera complicado, sobre todo porque son necesarios distintos cubos o recipientes para llevarlo a cabo o porque es una actividad diaria algo trabajosa.
Disminuir el uso del plástico es uno de los objetivos más ambiciosos de las administraciones, ya que su uso es excesivo. Y parece que las medidas propuestas están teniendo calado. De entre los más de 2.620 participantes en la encuesta de EROSKI CONSUMER, un 44% lleva sus propias bolsas para hacer las compras y un 36% lleva carro. Sin embargo, aún queda alrededor de un 20% de consultados que admite pedir bolsas de plástico en las tiendas.
Además de reciclar, ¿qué opinan los ciudadanos del sistema de recogida selectiva de residuos de sus ciudades? El 80% cree que los contenedores son accesibles y que están cerca de su domicilio. Sin embargo, la mitad de los consultados piensa que no se limpian con la frecuencia adecuada y uno de cada tres opina que no se vacían con una correcta periodicidad.
En cuanto a los puntos verdes, el 77% de los participantes de la encuesta sabe en qué lugar se encuentran, pero un 19% lo desconoce y un 4% asegura que no hay.
Por último, se preguntó a los usuarios por el impuesto de basura que cada uno de ellos paga; un 53% opina que es demasiado alto, mientras que una proporción similar (un 45%) considera que el importe es apropiado. Solo un 2% piensa que habría que incrementarla para mejorar.
Pese a todo, los ciudadanos consultados están satisfechos con el servicio de sus ayuntamientos. Aunque podrían mejorar. En una escala de diez puntos, la nota media ronda el 6: casi un siete para el servicio de recogida de basuras y la limpieza viaria de la ciudad no alcanza el seis.
Faltan contenedores de envases
En el análisis realizado en las ciudades, EROSKI CONSUMER ha observado que cada ciudadano ha generado una media de 31 kilos de papel-cartón al año, 16 kilos de vidrio, 14 de envases y 0,06 de pilas. Para reciclar estos residuos, el ciudadano necesita, primero, de conciencia ecológica pero también de una correcta dotación de contenedores para cometer este propósito. El PNIR recomienda que haya un contenedor de vidrio y papel-cartón por cada 500 habitantes. En este sentido, casi todas las ciudades estudiadas en el informe cumplen con esta máxima en ambos casos, excepto Barcelona y Madrid; aunque ambas rozan el equipamiento de contenedores de vidrio mínimo exigido. En este último punto, el mayor despliegue se observó en Pamplona (3,38 contenedores por cada 500 personas). Por su parte, en cuanto al papel-cartón, Barcelona es la que cuenta con un menor despliegue (0,95 recipientes para 500 habitantes) y de nuevo, Pamplona destaca positivamente (5,78).
En cuanto a los contenedores de envases, el Plan Integrado de Residuos Urbanos indica que debe colocarse uno por cada 300 habitantes. Precisamente, EROSKI CONSUMER ha comprobado que en materia de envases la mayoría de las ciudades estudiadas y que han proporcionado datos no cumplen con la premisa (aunque varias rocen el mínimo exigido). No obstante, todas las localidades han aumentado su dotación respecto a la que tenían en 2009, excepto Bilbao, Pamplona y Sevilla, aunque se mantienen prácticamente dentro de su media.
Con todo, la capital navarra y los municipios de su comarca mancomunada destacan por tener el mejor despliegue de contenedores con respecto a las demás ciudades analizadas en el estudio de EROSKI CONSUMER. En cifras, cuentan con tres contenedores para vidrio por cada 500 personas, casi seis para el papel-cartón y dos para los envases por cada 300 habitantes.
Además de los contenedores, los ciudadanos pueden utilizar los puntos limpios, (también denominados ecoparque, deixalleries o garbigunes). Son instalaciones de recogida selectiva para depositar residuos que no tienen contenedor urbano específico. El Plan Integral del Residuos Urbanos 2008-2015 prevé entre sus medidas la “ampliación de la red actual de puntos limpios”. En el estudio de EROSKI CONSUMER, se comprobó que todas las ciudades analizadas y que proporcionaron datos contaban con ecoparques, aunque destaca el despliegue de Barcelona con 39 (29 fijos y 10 móviles) y Madrid con 21 (16 fijos y 5 móviles), como dos de las ciudades más pobladas del país.
Pero, ¿cuánto se recupera?
El Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos se queja de “la insuficiencia de datos sobre generación y gestión de residuos, datos que son pocos y no siempre verificados”. Por ello proponen como uno de sus objetivos prioritarios “obtener estadísticas fiables”. Pese a estos buenos deseos, conseguir los porcentajes de lo que se recupera en cada ciudad no es sencillo. Así, tras mucho insistir, apenas nueve ayuntamientos facilitaron dichos datos (A Coruña, Barcelona, Bilbao, Murcia, Pamplona, Sevilla, Valladolid, Vitoria y Zaragoza), aunque en cuatro de ellos los porcentajes dados eran demasiado elevados, llegando incluso al 100%.
Ante esta situación, conviene tener en cuenta, por un lado, que el PNIR propone reciclar para el año que viene el 80% del vidrio, el 75% de papel y cartón, además del 50% de los plásticos. Y, por otro, las proporciones recuperadas a nivel nacional según el Ministerio de Medio Ambiente: el 49% de los envases de vidrio, el 74% del papel-cartón consumido, el 70% del total de envases puestos en el mercado y el 16% de las pilas y acumuladores portátiles puestos en el mercado.
Los datos facilitados a EROSKI CONSUMER arrojan diferencias entre ciudades. En el caso del vidrio, se observan porcentajes menores al 40% en los casos de Sevilla y A Coruña mientras en los casos de Barcelona, Bilbao y Vitoria se superan proporciones de recuperación de más de un 55%. En la recuperación del papel y cartón se pasa del 24% de la capital andaluza y el 26% de Vitoria al 73% de Pamplona mientras que en los envases, destacan de forma considerable los porcentajes de reciclaje de la capital navarra (55%) y murciana (65%).
¿Qué sucede con la materia orgánica?
Los residuos orgánicos pueden reciclarse para producir compost o abono. Para que sea posible es necesario realizar una recogida selectiva. Sin embargo, el PNIR detecta una ?escasa implantación de la recogida selectiva de la fracción orgánica?. EROSKI CONSUMER quiso comprobar en las ciudades analizadas cómo se
gestiona la materia orgánica. Alicante, Madrid, Murcia, Oviedo y Zaragoza reconocen no hacer una recogida selectiva de la materia orgánica. Tampoco Granada, Málaga, Sevilla ni Logroño, aunque las tres primeras ciudades aseguran separarla en la planta de tratamiento y la capital riojana en el ecoparque. A Coruña, Barcelona, Valencia y Valladolid tienen sistemas de recogida selectiva de la materia orgánica repartidos por toda la ciudad, mientras que Bilbao y Vitoria solo en determinados puntos y barrios.
Tasas e impuestos
Las tarifas que los ciudadanos pagan por la recogida, gestión y tratamiento de esas basuras son tan dispares como capitales se han analizado. En general, son cantidades variables que dependen de la categoría fiscal de la calle (como sucede en A Coruña, Alicante, Bilbao, Córdoba, Granada y Logroño), del valor catastral del inmueble (Madrid, Pamplona y Vitoria) o del consumo de agua en cada hogar (tarifa que se aplica para los vecinos de Sevilla y Zaragoza), en otras ocasiones se trata de un desembolso fijo cada año o bien está englobado
dentro del Impuesto de Bienes Inmuebles-IBI (así se hace en Barcelona, Málaga y Valladolid). En el caso de Valencia, no existe un pago específico por dicho servicio, ya que su coste se financia por medio de los presupuestos municipales de cada año; en Oviedo, la tasa a pagar depende de si ese vecino recicla o no.
Mientras en todos los casos anteriores, la tasa a pagar oscila, en las ciudades de Murcia y San Sebastián se paga una cantidad fija cada año (114,3 y 116,34 euros respectivamente).
Las variaciones de tarifas son más que llamativas en cuatro de las 18 capitales estudiadas por EROSKI CONSUMER: en Madrid los precios oscilan entre 4 y 173 euros; Córdoba, entre 44,70 y 160,82 euros; Logroño tiene tarifas entre 20,58 y 130 euros de máximo y Granada, donde la tasa de basuras que se aplica se
sitúa entre los 57,48 y los 134,52 euros anuales.
17 ciudades, una a una
- A Coruña
- Alicante
- Barcelona
- Bilbao
- Granada
- Logroño
- Madrid
- Málaga
- Murcia
- Oviedo
- Pamplona
- San Sebastián
- Sevilla
- Valencia
- Valladolid
- Vitoria
- Zaragoza
A Coruña
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de A Coruña
Cada ciudadano desechó 1,26 kilos de desperdicios al día, aproximadamente en la media del estudio, 1,24
A Coruña fue una de las ciudades del estudio que cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura, a pesar de que la población ha aumentado. La ciudad gallega produjo 112.771 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, un 3,7% menos que en 2008. Se sitúa muy cerca de la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. Así, cada ciudadano generó en A Coruña 1,26 kilos de basura al día el año pasado, un 4% menos que hace dos años y en la media del estudio (1,24).
El Ayuntamiento coruñés recoge los residuos con contenedores dispuestos en la calle. No cuentan con un sistema de recogida neumática (buzones donde la basura se aspira y se conduce de forma subterránea a un centro de almacenaje y retirada), aunque el vidrio lo recogen puerta a puerta. Los ciudadanos pueden depositar, entre las ocho de la tarde y la medianoche sus residuos domiciliarios en los contenedores, excepto en verano cuando el horario de depósito es de diez a doce de la noche.
A Coruña cumple con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que dispone de 1,20 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24) y 2 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47). Sin embargo, no hay contenedores de envases, sino que se tiran al recipiente destinado a la fracción resto. Aun así, existen, 5 ecoparques o puntos limpios destinados para residuos voluminosos que no cuentan con contenedor propio, son 4 fijos y 1 móvil.
La materia orgánica se recoge de manera selectiva todos los días de la semana a través de contenedores específicos de color naranja o marrón. Este sistema está implantado en toda la ciudad, un aspecto que la diferencia del resto de capitales analizadas (solo ocurre en Barcelona, Valencia y Valladolid). Estos desperdicios orgánicos se llevan a una planta de biometanización y compostaje y se convierten en compost y biogás para generar energía eléctrica.
La ciudad gallega fue una de las pocas ciudades que proporcionó datos sobre la recuperación y reciclaje de los residuos que crea año tras año. Así, se recupera el 35% del total de papel y cartón recogidos, el 39% de vidrio, el 20% de envases, el 34% de pilas y el 51% de materia orgánica.
Lo mejor y lo peor en A Coruña
- Lo mejor: con respecto a 2008, ha disminuido en casi un 4% la cantidad total de basura recogida en la ciudad. Además, la capital gallega cuenta con la segunda mejor proporción de contenedores de papel-cartón por cada 500 habitantes (dos).
- Lo peor: no hay contenedores de recogida selectiva de envases, se recogen con la fracción resto.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se cobra al año en función de la categoría fiscal de la calle: entre 58,59 y 66,86 euros.
Alicante
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Alicante
Cada ciudadano tiró 1,23 kilos de desperdicios al día, aproximadamente en la media del estudio, 1,24
Alicante fue una de las ciudades del estudio que cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura, a pesar de que la población ha aumentado en estos dos años. La ciudad alicantina produjo 149.728 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, casi un 11% menos que en 2008. Se sitúa así muy por encima de la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. En este sentido, en la capital alicantina, cada ciudadano generó 1,23 kilos de basura al día el año pasado, un 11% menos que hace dos años y en la media del estudio (1,24).
En la capital alicantina el principal sistema de recogida de residuos es el de los contenedores en la calle. Los ciudadanos pueden depositar entre las nueve y medianoche sus residuos domiciliarios y la recogida se lleva a cabo todos los días del año.
Así, Alicante cumple con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que dispone de 1,66 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24) y 1,24 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47). Sin embargo, la dotación de contenedores de envases no es suficiente, ya que cuenta con 0,69 por cada 300 personas (de nuevo, se establece que haya al menos uno y la media de las ciudades analizadas es de 1,36). Existen, además, 3 ecoparques (o deixalleries) para residuos voluminosos, 1 fijo y 2 móviles, aunque existen 10 puntos fijos más destinados a los residuos de pequeño tamaño.
En la ciudad alicantina, sin embargo, no se recoge de manera selectiva la materia orgánica y fue una de las nueve capitales analizadas donde no se proporcionaron datos sobre la recuperación y reciclaje de los residuos que se crean año tras año.
Lo mejor y lo peor en Alicante
- Lo mejor: ha reducido en casi un 11% la cantidad de basura recogida el pasado 2010 con relación a los datos obtenidos en 2008; un porcentaje por encima de la media. Otro de los puntos satisfactorios es que hay recogida de residuos todos los días.
- Lo peor: el número de contenedores para la recogida de envases por cada 300 habitantes no llega a la media del estudio ni a lo exigido por el PNIR. Alicante solo cuenta con un ecoparque o punto limpio fijo, cuando una ciudad más pequeña como Oviedo dispone de dos.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se cobra al año según la categoría fiscal de la calle y el tamaño de la vivienda: entre 20,38 y 51,79 euros.
Barcelona
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Barcelona
Sin embargo, cada ciudadano tiró 1,43 kilos de desperdicios al día, por encima de la media del estudio (1,24) y una de las ratios más altas del estudio
Barcelona fue una de las ciudades del estudio que cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura, a pesar de que desde el último estudio la población ha aumentado. La ciudad condal produjo 844.140 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, un 2% menos que en 2008. Sin embargo, se sitúa por debajo de la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. Así, en la capital catalana, cada ciudadano generó 1,43 kilos de basura al día el año pasado, un 2% menos que hace dos años, pero una de las ratios más altas del estudio.
La capital catalana es una de las pocas ciudades que ha implantado un sistema de recogida neumática de residuos (buzones donde la basura se aspira y se conduce de forma subterránea a un centro de almacenaje y retirada) con el que no es necesario ajustarse a un horario de depósito concreto. Los ciudadanos pueden dejar en los contenedores, entre las ocho de la tarde y las diez de la noche, sus residuos domiciliarios (la fracción orgánica y resto). Mientras que el horario de depósito del vidrio es durante el día, de ocho de la mañana a diez de la noche.
Sin embargo, la ciudad condal no cumple con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que dispone de 0,94 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24), 0,95 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47) y 0,56 contenedores de envases cada 300 personas (de nuevo, se establece que haya al menos uno y la media de las ciudades analizadas es de 1,36). Existen, además, 39 ecoparques (o deixalleries) para residuos voluminosos, 29 fijos y 10 móviles, el mayor equipamiento del estudio.
En este sentido, la materia orgánica se recoge de manera selectiva todos los días de la semana a través de contenedores específicos de color naranja o marrón. Este sistema está implantado en toda la ciudad, un aspecto que la diferencia del resto de capitales analizadas (solo ocurre en A Coruña, Valencia y Valladolid). Estos desperdicios orgánicos se llevan a los ecoparques y se convierten en compost y energía.
La capital catalana fue una de las pocas ciudades que proporcionó datos sobre la recuperación y reciclaje de los residuos que crea año tras año. Así, se recupera el 57% del total de papel y cartón generado, el 56% de vidrio, el 21% de envases y el 46% de materia orgánica.
Lo mejor y lo peor en Barcelona
- Lo mejor: es la capital, de todas las estudiadas por la revista, que tiene el mayor número de ecoparques o puntos limpios (39). La materia orgánica se recoge de manera selectiva en toda la ciudad.
- Lo peor: apenas ha reducido un 2% (la media es 4%) la cantidad de desperdicios recogidos durante el pasado año y es la tercera ciudad que más kilogramos de basura genera por habitante al día (1,43).
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos está englobada en el recibo del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) que pagan los ciudadanos.
Bilbao
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Bilbao
Cada ciudadano desechó 1,25 kilos de desperdicios al día, aproximadamente en la media del estudio, 1,24
Bilbao fue una de las ciudades del estudio que cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura, y eso que la población prácticamente se ha mantenido en estos dos años. La ciudad vizcaína produjo 160.653 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, un 10% menos que en 2008. Se sitúa así muy por encima de la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. Así, en la capital bilbaína, cada ciudadano generó 1,25 kilos de basura al día el año pasado, casi un 10% menos que hace dos años y en la media del estudio (1,24).
La capital vizcaína es una de las pocas ciudades que ha implantado en algunas zonas de la ciudad un sistema de recogida neumática de residuos (buzones donde la basura se aspira y se conduce de forma subterránea a un centro de almacenaje y retirada) con el que no es necesario ajustarse a un horario de depósito concreto. Eso sí, el principal sistema de recogida se realiza mediante islas o puntos con contenedores. Los ciudadanos pueden depositar entre las ocho y media de la tarde y las diez y media de la noche sus residuos domiciliarios.
Así, Bilbao cumple con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que dispone de 1,13 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24), 1,49 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47) y 1,22 contenedores de envases cada 300 personas (de nuevo, se establece que haya al menos uno y la media de las ciudades analizadas es de 1,36). Existen, además, 6 ecoparques (o garbigunes) para residuos voluminosos, 4 fijos y 2 móviles.
En este sentido, la materia orgánica se recoge de manera selectiva los martes y los viernes a través de contenedores específicos de color gris o marrón. Sin embargo, este sistema tan solo es una experiencia piloto y no está implantado en toda la ciudad, como ocurre en otras ciudades más avanzadas en esta materia como A Coruña, Barcelona, Valencia y Valladolid. Estos desperdicios orgánicos se convierten finalmente en compost.
La capital bilbaína fue una de las pocas ciudades que proporcionó datos sobre la recuperación y reciclaje de los residuos que crea año tras año. Así, se recupera el 36% del total de papel y cartón recogido, el 57% de vidrio, el 20% de envases, el 45% de pilas y el 4% de materia orgánica.
Lo mejor y lo peor en Bilbao
- Lo mejor: la cantidad total de residuos urbanos recogidos en 2010 con respecto a 2008 ha descendido en un 10% (la media general es de una reducción de un 4%). Asimismo, hacen recogida selectiva de la materia orgánica doméstica.
- Lo peor: el número de contenedores para la recogida de vidrio por cada 500 habitantes y de envases por cada 300 vecinos no llega a la media general. La materia orgánica no se recoge de forma selectiva en toda la ciudad, tan solo en un barrio.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se cobra al trimestre según la categoría fiscal de la calle: entre 10,04 euros y 42,25 euros.
Granada
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Granada
Cada ciudadano desechó 1,58 kilos de desperdicios al día, la ratio más alta del estudio (la media global es de 1,24 kilos)
Granada fue una de las pocas ciudades del estudio que no cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura, a pesar de que la población haya aumentado. La ciudad andaluza produjo 137.683 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, un 12,5% más que en 2008. Se sitúa muy lejos de la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. Así, cada ciudadano generó en Granada 1,58 kilos de basura al día el año pasado, un 11% más que hace dos años, la mayor proporción del estudio (la media global es de 1,24 kilos).
El Ayuntamiento granadino recoge los residuos en contenedores dispuestos en la calle. No cuentan con un sistema de recogida neumática (buzones donde la basura se aspira y se conduce de forma subterránea a un centro de almacenaje y retirada). Los ciudadanos pueden depositar sus residuos domiciliarios en los recipientes entre las ocho de la tarde y las once de la noche.
Granada cumple con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que dispone de 1,30 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24) y 1,38 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47). Sin embargo, en materia de contenedores de envases no alcanza la dotación recomendada y se queda en 0,96 por cada 300 personas (de nuevo, se establece que haya al menos uno y la media de las ciudades analizadas es de 1,36). Aun así, existen, 2 ecoparques, 1 fijo y 1 móvil, para los residuos voluminosos.
En la ciudad granadina no se recoge de manera selectiva la materia orgánica, aunque en la planta de tratamiento de la fracción resto dependiente del consorcio de residuos provincial sí se hace separación de este tipo de residuos. Por otro lado, la ciudad andaluza fue una de las nueve capitales estudiadas donde no se proporcionaron datos sobre la recuperación y reciclaje de los residuos que se crean año tras año.
Lo mejor y lo peor en Granada
- Lo mejor: cumple los objetivos del PNIR en dotación de contenedores de vidrio y papel-cartón.
- Lo peor: no facilitaron información sobre el porcentaje de residuos recuperados y la cantidad de basura recogida en 2010 con respecto a 2008 ha aumentado en un 12,5%, cuando la media general apunta a un descenso del 4%. Por habitante y día, el aumento fue de un 11%.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se cobra al año en función de la categoría fiscal de la calle: entre 57,48 y 134,52 euros.
Logroño
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Logroño
Cada ciudadano desechó 1,01 kilos de desperdicios al día, la ratio más baja del estudio (la media es de 1,24 kilos)
Logroño fue una de las ciudades del estudio que cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura, a pesar de que la población ha aumentado en dos años. La ciudad riojana produjo 56.069 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, casi un 11% menos que en 2008. Se sitúa así muy por encima de la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. En este sentido, en la capital logroñesa, cada ciudadano generó 1,01 kilos de basura al día el año pasado, casi un 12% menos que hace dos años y la proporción más baja del estudio.
En la capital riojana, el principal sistema de recogida de residuos es el de los contenedores en la calle y soterrados. Los ciudadanos pueden depositar entre las ocho de la tarde y las diez de la noche sus residuos domiciliarios y la recogida se lleva a cabo todos los días del año.
Así, Logroño cumple con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que dispone de 1,54 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24) y 1,43 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47). Sin embargo, la dotación de contenedores de envases no es suficiente, ya que cuenta con 0,82 por cada 300 personas (de nuevo, se establece que haya al menos uno y la media de las ciudades analizadas es de 1,36). Existen, además, 3 ecoparques para residuos voluminosos, 1 fijo y 2 móviles.
En la ciudad riojana, sin embargo, no se recoge de manera selectiva la materia orgánica, aunque en la separación se realiza después en los ecoparques. Por otro lado, la ciudad logroñesa fue una de las nueve capitales estudiadas donde no se proporcionaron datos sobre la recuperación y reciclaje de los residuos que se crean año tras año.
Lo mejor y lo peor en Logroño
- Lo mejor: se ha reducido en algo más de un 10% la cantidad total de residuos urbanos recogidos en 2010. Es la ciudad que menos kilos de desperdicios por habitante genera, 1,01.
- Lo peor: no facilitaron información sobre el porcentaje de residuos recuperados. No hacen recogida selectiva de materia orgánica, aunque la separación se realiza después en los ecoparques.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se cobra al año según la categoría fiscal de la calle: entre 20,58 y 130 euros.
Madrid
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Madrid
Cada ciudadano desechó 1,23 kilos de desperdicios al día, aproximadamente en la media del estudio, 1,24
Madrid fue una de las ciudades del estudio que cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura, a pesar de que la población ha aumentado en dos años. La ciudad produjo 1.470.461 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, casi un 8% menos que en 2008. Se sitúa así por encima de la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. En este sentido, en la capital madrileña, cada ciudadano generó 1,23 kilos de basura al día el año pasado, casi un 10% menos que hace dos años y en la media del estudio (1,24).
En Madrid, el sistema mayoritario de recogida de basura es el de contenedores en la calle. Los ciudadanos pueden depositar sus residuos domiciliarios a partir de las diez de la noche. En este sentido, la empresa de recogida de desperdicios cumple con la dotación de recipientes de este tipo que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que dispone de 1,45 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47) y 8,41 de envases cada 300 personas (de nuevo, se establece que haya al menos uno y la media de las ciudades analizadas es de 1,36). Estos últimos son menores en tamaño (entre 800 litros y 240 litros, mientras que lo común son recipientes de unos 3.000 litros) y se han instalado en función de las necesidades de los vecindarios.
Las carencias se perciben en materia de contenedores de vidrio cuentan con 0,93 por cada 500 habitantes, cuando la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24. Existen, además, 21 ecoparques para residuos voluminosos, 16 fijos y 5 móviles, el segundo mayor equipamiento del estudio.
Madrid fue una de las nueve ciudades que no facilitó datos sobre la recuperación y reciclaje de los residuos que crea año tras año. Aun así, el tratamiento de la basura urbana se realiza en tres plantas de compostaje, tres de clasificación y una incineradora. Además, en el Centro de tratamiento de Valdemingómez también hay dos plantas de biometanización y una de tratamiento de biogás. El resto se tira a un vertedero controlado.
Lo mejor y lo peor en Madrid
- Lo mejor: la cantidad de desperdicios urbanos recogidos en 2010 por los servicios de limpieza municipal se ha reducido en un 7,5% con respecto a las cifras de 2008.
- Lo peor: no cumple con el objetivo de PNIR de tener un contenedor de vidrio por cada 500 habitantes, aunque no está lejos de lograrlo (0,93).
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se cobra al año en función del valor catastral de la vivienda: entre 4 y 173 euros.
Málaga
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Málaga
Cada ciudadano desechó 1,52 kilos de desperdicios al día, lejos de la media del estudio, 1,24, y entre las proporciones más altas del estudio
Málaga fue una de las ciudades del estudio que no cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura. La ciudad malagueña, cuya población ha aumentado en estos dos años, produjo 314.521 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, un 3% más que en 2008. Se sitúa así lejos de la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. En este sentido, en la ciudad andaluza, cada ciudadano generó 1,52 kilos de basura al día el año pasado, un 3% más que hace dos años y la segunda proporción más alta del estudio.
En la capital malagueña el principal sistema de recogida de residuos es el de los contenedores en la calle. Los ciudadanos pueden depositar entre las nueve y las once de la noche sus residuos domiciliarios y la recogida se lleva a cabo todos los días del año.
Así, Málaga cumple con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que dispone de 1,18 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24) y 1,32 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47). Sin embargo, la dotación de contenedores de envases no es suficiente, ya que cuenta con 0,68 por cada 300 personas (de nuevo, se establece que haya al menos uno y la media de las ciudades analizadas es de 1,36). Existen, además, 2 ecoparques para residuos voluminosos, 1 fijo y 1 móvil.
En la ciudad andaluza, sin embargo, no se recoge de manera selectiva la materia orgánica, aunque se trata posteriormente para convertirla en compostaje. Además, fue una de las nueve capitales analizadas donde no se proporcionaron datos sobre la recuperación y reciclaje de los residuos que se crean año tras año.
Lo mejor y lo peor en Málaga
- Lo mejor: hay servicio de recogida de residuos los 365 días del año.
- Lo peor: no facilitaron información sobre el porcentaje de residuos recuperados y la cantidad de basura recogida en 2010 con respecto a 2008 ha aumentado en un 3%, cuando la media general apunta a un descenso del 4%.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se engloba dentro del IBI.
Murcia
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Murcia
Una cantidad similar a la media de 1,24 kilos diarios del resto de ciudades
Cada habitante de Murcia generó el pasado año un total de 1,27 kilos de basura al día, un porcentaje que se acerca a la media de 1,24 del resto de ciudades analizadas. En concreto, en 2010 se recogieron 204.436 toneladas de desperdicios, aunque no se puede comparar con 2008, ya que entonces la ciudad no facilitó información para elaborar el anterior estudio.
En la capital murciana el principal sistema de recogida de desperdicios es mediante contenedores en la calle. El horario de depósito de los residuos domiciliarios es de ocho de la tarde a once de la noche y se recogen todos los días del año. Así, Murcia cumple con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que dispone de 1,41 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24), 1,24 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47) y 1,16 contenedores de envases cada 300 personas (de nuevo, se establece que haya al menos uno y la media de las ciudades analizadas es de 1,36). Existen, además, 5 ecoparques para residuos voluminosos, 1 fijo y 4 móviles.
Sin embargo, en la capital murciana no se hace recogida selectiva de la materia orgánica, como ya se hace en otras ciudades como A Coruña, Barcelona, Valencia y Valladolid, donde se ha implantado en toda la ciudad. En general, los residuos sólidos urbanos se tratan en plantas de clasificación y de compost.
Lo mejor y lo peor en Murcia
- Lo mejor: cuenta con cuatro ecoparques móviles. Tiene un contenedor de vidrio y otro de papel y cartón por cada 500 habitantes. Además, cumple también la normativa en materia de recipientes de envases y dispone de uno por cada 300 vecinos. Todos los días se recoge la basura.
- Lo peor: No es posible hacer comparaciones con 2008, ya que entonces no facilitaron datos.
- En la tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se cobra una cantidad fija de 19,05 euros cada dos meses.
Oviedo
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Oviedo
Cada habitante produjo el año pasado 1,11 kilos al día de residuos sólidos, una de las proporciones más bajas del estudio
La ciudad de Oviedo cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura, ya que se recogieron 91.194 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, un 4% menos que en 2008. Se sitúa así en la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. Asimismo, cada ciudadano generó 1,11 kilos de basura al día el año pasado, por debajo de la media del estudio (1,24), lo que se traduce en un 6% menos de basura por habitante y día.
Oviedo es la única ciudad que dispone para la basura de un sistema de recogida puerta a puerta mediante cubos que cada comunidad de vecinos saca a la vía pública con un horario de depósito desde las 21.00 horas y las 22.30 horas (salvo los domingos y los días 24 y 31 de diciembre que no hay servicio de recogida).
Además de esa recogida puerta a puerta en cada comunidad de vecinos, hay instaladas otras 21 islas de contenedores soterrados para la recogida selectiva que sirven de apoyo a esa acción que se realiza en los domicilios. A esto hay que añadir dos ecoparques fijos para residuos voluminosos.
Asimismo, la capital asturiana no hace una recogida selectiva de materia orgánica (desperdicios que finalmente se convierten en compost), como ya se hace en otras ciudades como A Coruña, Barcelona, Valencia y Valladolid, donde es un sistema que se ha implantado en toda la ciudad. Se desconoce la proporción de residuos recuperados o reciclados, pero tratan la basura en dos plantas de clasificación y una de compostaje.
Lo mejor y lo peor en Oviedo
- Lo mejor: es la única ciudad en la que se recoge la basura puerta a puerta, además de contar con 21 islas de contenedores soterrados para la recogida selectiva. En los últimos dos años ha disminuido en un 4% la cantidad de basura recogida.
- Lo peor: se desconoce la proporción de residuos recuperados o reciclados porque no se facilitó esta información.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se paga en función de si se recicla o no: entre 67,44 y 77,10 euros.
Pamplona
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Pamplona
Cada habitante produjo el año pasado 1,16 kilos al día de residuos sólidos, una cantidad inferior a la media de 1,24 kilos diarios del resto de ciudades
Los municipios pertenecientes a la Mancomunidad de Pamplona cumplieron con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura, a pesar de que la población ha aumentado en dos años. La zona produjo 148.209 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, casi un 4% menos que en 2008. Se sitúa así en la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. Así, cada ciudadano generó 1,16 kilos de basura al día el año pasado, por debajo de la media del estudio (1,24), que se traduce en un 7% menos de basura por vecino y día comparado con 2008.
La Mancomunidad de Pamplona es una de las pocas zonas que ha implantado este año en algunos puntos un sistema de recogida neumática de residuos (buzones donde la basura se aspira y se conduce de forma subterránea a un centro de almacenaje y retirada) con el que no es necesario ajustarse a un horario de depósito concreto. Eso sí, el principal sistema de recogida se realiza mediante islas o puntos con contenedores. Los ciudadanos pueden depositar sus residuos domiciliarios durante todo el día, excepto el vidrio que no puede tirarse entre las diez de la noche y las ocho de la mañana.
Así, las localidades pertenecientes a la Mancomunidad cumplen con creces con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que disponen de 3,38 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24), 5,78 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47) y 2,89 contenedores de envases cada 300 personas (de nuevo, se establece que haya al menos uno y la media de las ciudades analizadas es de 1,36). Existen, además, 6 ecoparques (o garbigunes) para residuos voluminosos, 2 fijos y 4 móviles.
La única materia orgánica que se recoge de manera selectiva es la que procede de la poda, que se traslada a una planta para convertirla en compostaje. Aun así, en este momento se redacta un proyecto para poner en marcha la recogida selectiva de la fracción orgánica de usuarios domésticos y grandes generadores.
Lo mejor y lo peor en Pamplona
- Lo mejor: tiene la mejor dotación de contenedores del estudio: 3 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes, casi 6 de papel-cartón por cada 500 personas y casi 3 de vidrio por cada 300 ciudadanos. Ha descendido en dos años la cantidad de residuos generados. Además, ha aumentado el número de ecoparques móviles: de dos en 2008 a cuatro en la actualidad.
- Lo peor: la única materia orgánica que se recoge de manera selectiva es la que procede de la poda, aunque en este momento se redacta un proyecto para poner en marcha la recogida selectiva de la fracción orgánica de usuarios domésticos y grandes generadores.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se cobra al año en función del valor catastral de la vivienda: entre 33,22 y 95,96 euros.
San Sebastian
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de San Sebastián
Cada habitante produjo el año pasado 1,26 kilos al día de residuos sólidos, una cantidad algo superior a la media de 1,24 kilos diarios del resto de ciudades
San Sebastián fue una de las ciudades del estudio que cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura, a pesar de que la población ha aumentado en estos dos años. La ciudad guipuzcoana produjo 85.440 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, un 9% menos que en 2008. Se sitúa así por encima de la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. Cada ciudadano generó 1,26 kilos de basura al día el año pasado, similar a la media del estudio (1,24), lo que supone un descenso del 10% en la cantidad de basura generada por vecino y día.
La capital guipuzcoana es una de las pocas ciudades que ha implantado en dos barrios de la ciudad un sistema de recogida neumática de residuos (buzones donde la basura se aspira y se conduce de forma subterránea a un centro de almacenaje y retirada) con el que no es necesario ajustarse a un horario de depósito concreto. Eso sí, de momento, el principal sistema de recogida se realiza mediante contenedores. Los ciudadanos pueden depositar sus residuos domiciliarios entre las siete y media de la tarde y las diez y media de la noche, excepto en el centro histórico, donde el horario de depósito es de nueve y media a diez de la noche.
En San Sebastián, no se proporcionaron datos sobre el número de contenedores de vidrio, papel-cartón y envases con los que cuenta la ciudadanía. Por el contrario, se logró saber que la materia orgánica se recoge de manera selectiva a través de 81 contenedores específicos de color naranja o marrón, aunque se desconoce dónde se encuentra implantado este sistema o en qué se convierten este tipo de desperdicios domiciliarios orgánicos. Asimismo, la capital guipuzcoana fue una de las nueve ciudades que no facilitaron datos sobre la recuperación y reciclaje de los residuos que crea año tras año.
Lo mejor y lo peor en San Sebastián
- Lo mejor: disminuyeron en casi un 9% las toneladas de residuos recogidas en la capital guipuzcoana. Cuentan con sistema de recogida neumática en determinadas zonas de la ciudad.
- Lo peor: no facilitaron datos fundamentales como el porcentaje de recuperación de residuos, ni el número de contenedores de recogida selectiva o los equipamientos municipales donde se tratan los residuos.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos es fija: se pagan 19,39 euros cada dos meses.
Sevilla
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Sevilla
Cada habitante produjo el año pasado 1,43 kilos al día de residuos sólidos, una cantidad superior a la media de 1,24 kilos diarios del resto de ciudades
La ciudad de Sevilla cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura, ya que se recogieron 368.145 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, un 2,8% menos que en 2008. Se sitúa así por debajo de la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. Sin embargo, cada ciudadano generó 1,43 kilos de basura al día el año pasado, por encima de la media del estudio (1,24). Con respecto a hace dos años, se ha reducido en un 3% la cantidad de basura generada por habitante y día.
Sevilla es una de las pocas ciudades que dispone de un sistema de recogida neumática de residuos (buzones donde la basura se aspira y se conduce de forma subterránea a un centro de almacenaje y retirada) con total libertad horaria. Pero tan solo está implantado en dos barrios de la ciudad. A esto se suman los contenedores convencionales, donde los sevillanos pueden depositar la basura entre las ocho de la tarde y las once de la noche. Todos los días del año hay recogida de basuras. Además, en el casco antiguo hay cubos individuales en cada vivienda.
Sevilla cumple con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que disponen de 1,23 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24), 1,42 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47) y 1,96 recipientes para envases (como mínimo uno por cada 300 personas y cuando la media de las ciudades analizadas es de 1,36). Existen, además, 4 ecoparques para residuos voluminosos, todos ellos fijos y ninguno móvil.
Asimismo, la capital andaluza no hace una recogida selectiva de materia orgánica (desperdicios que finalmente se convierten en compost), sino que se separa posteriormente en una planta de tratamiento. Sin embargo, la capital sevillana fue una de las pocas ciudades que proporcionó datos sobre la recuperación y reciclaje de los residuos que crea año tras año. Así, se recupera el 35% del total de vidrio recogido, el 24% de papel y cartón y el 17% de envases.
Lo mejor y lo peor en Sevilla
- Lo mejor: facilitó datos de residuos recuperados: 35% de vidrio, 24% de papel y cartón y 17% del total de envases recogidos en 2010. Ha descendido casi un 3% la cantidad de basura generada por los sevillanos, aunque por debajo de la media.
- Lo peor: no cuenta con ecoparques móviles. Ha disminuido la dotación de contenedores de envases de dos a uno por cada 300 habitantes, aunque se cumple la norma.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se paga en función del consumo de agua de la vivienda.
Valencia
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Valencia
Cada habitante produjo el año pasado 1,26 kilos al día de residuos sólidos, una cantidad algo superior a la media de 1,24 kilos diarios del resto de ciudades
La ciudad de Valencia cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura, ya que 371.045 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, un 8% menos que en 2008. Se sitúa por encima de la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. Así, cada ciudadano generó 1,26 kilos de basura al día el año pasado, algo más que la media del estudio (1,24) y un 9% menos que hace dos años.
En Valencia se utilizan principalmente los contenedores como sistema de recogida de residuos urbanos, donde los vecinos depositan la basura desde las ocho de la tarde y hasta el paso del camión recolector. No hay ningún día al año en el que no haya recogida de desperdicios.
Valencia cumple, de forma ajustada, con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que disponen de 1,10 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24) y 1,05 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47). No sucede lo mismo con los contenedores para envases (como mínimo uno por cada 300 personas) ya que en la capital valenciana la ratio es de 0,61 recipientes (la media de las ciudades analizadas es de 1,36). Existen, además, 4 ecoparques (o deixalleries) para residuos voluminosos, 1 fijos y 3 móviles; estos últimos se duplicarán antes de que finalice el presente año.
En este sentido, la materia orgánica se recoge de manera selectiva por medio de contenedores específicos de color naranja o marrón. Además, este sistema está implantado en toda la ciudad, como ocurre en otras ciudades del estudio como A Coruña, Barcelona y Valladolid. Por otra parte, la capital valenciana fue una de las nueve ciudades que no facilitaron datos sobre la recuperación y reciclaje de los residuos que crea año tras año.
Lo mejor y lo peor en Valencia
- Lo mejor: ha disminuido en un 8%, en los últimos dos años, las toneladas de residuos urbanos generados por los valencianos. Tienen tres ecoparques móviles.
- Lo peor: no llega a tener un contenedor de envases por cada 300 habitantes, incumpliendo el II Plan Nacional Integrado de Residuos. Se desconoce la proporción de residuos recuperados o reciclados.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos está englobada dentro de los presupuestos del Ayuntamiento.
Valladolid
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Valladolid
Cada habitante produjo el año pasado 1,06 kilos al día de residuos sólidos, una cantidad inferior a la media de 1,24 kilos diarios del resto de ciudades
Valladolid fue una de las ciudades del estudio que cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura. La ciudad castellana produjo 122.469 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, un 6,7% menos que en 2008. Asimismo, se sitúa por encima de la media de las ciudades analizadas que produjeron un 4% menos de basura en ese mismo periodo de tiempo. Los vecinos de Valladolid generaron cada día del año pasado un total de 1,03 kilogramos de basura cada uno de ellos, una de las ratios más bajas del estudio, lo que se traduce en un 6% menos que hace dos años.
Es, además, una de las ciudades que no ha implantado un sistema de recogida neumática de residuos (buzones donde la basura se aspira y se conduce de forma subterránea a un centro de almacenaje y retirada), con el que no es necesario ajustarse a un horario de depósito concreto, sino que su sistema mayoritario es a través de contenedores en la vía pública. Los ciudadanos pueden depositar en ellos entre las ocho de la tarde y las once de la noche sus residuos domiciliarios. La recogida no se efectúa 10 días festivos al año además de los domingos, cuando no se recoge la fracción orgánica.
La ciudad cumple con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que dispone de 1,41 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24) y 1,62 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47). En el caso de los contenedores para envases (de nuevo, se establece que haya al menos uno por cada 300 habitantes), los ciudadanos vallisoletanos disponen de un contenedor diferenciado para la fracción resto o inorgánica, en el que se recogen los envases. Existen, además, 7 ecoparques (o deixalleries) para residuos voluminosos, 5 fijos y 2 móviles.
En este sentido, la materia orgánica se recoge de manera selectiva de lunes a sábado a través de contenedores específicos de color marrón. En el caso de Valladolid, este sistema está implantado en toda la ciudad, un aspecto que la diferencia del resto de capitales analizadas (solo ocurre en la capital castellana, en A Coruña, Barcelona y en Valencia). Estos desperdicios orgánicos se llevan a una planta de tratamiento y se convierten en compost y biogas.
Lo mejor y lo peor en Valladolid
- Lo mejor: tiene en total siete ecoparques (cinco fijos y dos móviles). La basura generada por los vallisoletanos ha disminuido en los últimos dos años casi un 7%.
- Lo peor: no hay recogida de basura diez días al año (festivos) y los domingos tampoco se recoge la fracción orgánica.
- La tasa por la recogida y gestión de los residuos urbanos se engloba dentro del recibo del IBI
Vitoria
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Vitoria
Cada ciudadano crea 1,06 kilos de basura por habitante al día (una de las ratios más bajas del estudio)
Vitoria produjo 92.407 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, un 2% más que en 2008. Sin embargo, la población ha aumentado un 2,5% durante dos años, de modo que la proporción de basura creada por habitante y día ha disminuido casi un 1% desde 2008, alcanzando la cifra de 1,06 kilos. Con esta ratio, la capital alavesa se convierte en la ciudad vasca donde menos residuos sólidos urbanos por ciudadano y día se genera, y la tercera a nivel nacional.
La capital alavesa es una de las pocas ciudades que ha implantado en algunas zonas de la ciudad un sistema de recogida neumática de residuos (buzones donde la basura se aspira y se conduce de forma subterránea a un centro de almacenaje y retirada) con el que no es necesario ajustarse a un horario de depósito concreto. Eso sí, de momento, el principal sistema de recogida se realiza mediante islas o puntos con contenedores. Los ciudadanos pueden depositar sus residuos domiciliarios desde las nueve de la noche en invierno y desde las diez de la noche en verano.
Así, Vitoria cumple con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que dispone de 1,48 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24) y 1,44 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47). Pero falla en cuanto a recipientes de envases, ya que cuenta con 0,85 por cada 300 personas, cuando se establece que haya al menos uno y la media de las ciudades analizadas es de 1,36. Existen, además, 4 ecoparques (o garbigunes) para residuos voluminosos, 2 fijos y 2 móviles.
En este sentido, la materia orgánica se recoge de manera selectiva a través de contenedores específicos de color naranja o marrón cuatro días a la semana, y recogida neumática todos los días de la semana. Sin embargo, este sistema no está implantado en toda la ciudad, como ocurre en otras ciudades más avanzadas en este aspecto como A Coruña, Barcelona, Valencia y Valladolid. Estos desperdicios orgánicos se convierten finalmente en biogás y compost.
La capital vitoriana fue una de las pocas ciudades que proporcionó datos sobre la recuperación y reciclaje de los residuos que crea año tras año. Así, se recupera el 26% del total de papel y cartón recogido, el 56% de vidrio, el 19% de envases y el 40% de materia orgánica.
Lo mejor y lo peor en Vitoria
- Lo mejor: debido al aumento de la población, la proporción de basura generada por habitante y día es la mejor del País Vasco, 1,06 kilos. Cuenta con una correcta dotación de contenedores de vidrio y papel-cartón: uno por cada 500 habitantes respectivamente. También dispone de cuatro ecoparques. Hace recogida selectiva de materia orgánica, aunque este sistema no está implantado en toda la ciudad.
- Lo peor: apenas roza el contenedor de envases por cada 300 habitantes.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se cobra al año en función del tamaño de la vivienda: entre 46,52 euros y 87,59 euros.
Zaragoza
Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU): analizados los sistemas de recogida y gestión de 18 ciudades, entre ellos el de Zaragoza
Cada habitante produjo el año pasado 1,02 kilos al día de residuos sólidos, una cantidad inferior a la media de 1,24 kilos diarios del resto de ciudades
Zaragoza fue una de las ciudades del estudio que cumplió con el objetivo prioritario de generar cada vez menos basura. La ciudad produjo 251.493 toneladas de residuos sólidos urbanos en 2010, casi un 4% menos que en 2008. Asimismo, cada ciudadano generó 1,02 kilos de basura al día el año pasado, una de las ratios más bajas del estudio junto con Logroño (1,01 kilos), y que se traduce en cerca de un 5% menos que hace dos años.
La capital aragonesa es una de las pocas ciudades que ha implantado un sistema de recogida neumática de residuos (buzones donde la basura se aspira y se conduce de forma subterránea a un centro de almacenaje y retirada) con el que no es necesario ajustarse a un horario de depósito concreto. El otro sistema implantado es el de los contenedores, en los que los ciudadanos pueden depositar entre las nueve de la tarde y las once de la noche sus residuos domiciliarios. Únicamente los días 25 de diciembre y 1 de enero no hay servicio de recogida de basuras en la ciudad.
La ciudad cumple con el número de contenedores que exige el Plan Nacional Integrado de Residuos Urbanos, ya que dispone de 1,17 recipientes de vidrio por cada 500 habitantes (la norma recomienda que sea uno y la media del estudio es de 1,24), 1,20 contenedores de papel y cartón cada 500 ciudadanos (tiene que haber uno, como mínimo, y la media nacional es de 1,47) y 0,92 contenedores de envases cada 300 personas (de nuevo, se establece que haya al menos uno y la media de las ciudades analizadas es de 1,36). Existen, además, 8 ecoparques para residuos voluminosos, 4 fijos y 4 móviles (la tercera dotación más amplia del estudio).
En este sentido, en el caso de Zaragoza no se recoge la materia orgánica de manera selectiva a través de contenedores específicos de color naranja o marrón, como ya se hace en otras ciudades como A Coruña, Barcelona, Valencia y Valladolid, donde está implantado en toda la ciudad.
Lo mejor y lo peor en Zaragoza
- Lo mejor: ha descendido la basura generada en los últimos dos años, tiene sistema de recogida neumática y cuenta con 8 ecoparques (4 fijos y 4 móviles).
- Lo peor: no alcanza el mínimo exigido en dotación de contenedores de envases, aunque lo roza: cuenta con 0,92 por cada 300 habitantes.
- La tasa municipal por recogida y tratamiento de los residuos urbanos se paga en función del consumo de agua de la vivienda entre 32,13 y 35,38 euros cada año.