El gasto familiar se derrumba un 20% en seis años
Sigue sin ser el mejor momento para muchas familias en España. Según la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística (INE), un 17% de los hogares españoles manifestó llegar a fin de mes con mucha dificultad en 2013 y otro 9% también reconoce que se está retrasando a la hora de realizar pagos relacionados con la vivienda principal.
La crisis golpea con fuerza desde su inicio: dos de cada cinco familias no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos y menos aún, para irse de vacaciones fuera de su casa una semana al año. Lo peor: estos datos no han dejado de agravarse desde hace tres años.
Ante esta situación, EROSKI CONSUMER ha querido indagar cuánto y cómo gastan las familias españolas, así como la evolución de su gasto familiar desde 2006 a 2012, un periodo fundamental que transcurre por la difícil crisis económica. También se han analizado los datos comunidad por comunidad. Toda esta información se ha obtenido a partir de la Encuesta de Presupuestos Familiares que año a año publica el INE.
Gasto familiar anual de 28.100 euros
El gasto medio por hogar en España en 2012 ascendió a 28.151 euros. Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2007, año en el que se alcanzaron los 32.000 euros de media. Con todo, en seis años, la contracción ha sido del 12%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar se derrumba un 20%.
Todo esto demuestra muy claramente que la crisis ha hecho mella en las carteras de las familias españolas. Esta situación difiere en función de las comunidades autónomas. Mientras que en Madrid, País Vasco y Navarra los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros, en Canarias y Extremadura no alcanzan los 23.000. En todas las demás regiones el gasto se ha contraído en seis años, pero destaca el fuerte descenso en el gasto de los canarios: un 18%.
Por tipo de hogar, quienes más gastan son las parejas con 3 o más hijos (más de 38.000 euros), mientras que los más ahorradores son los hogares o familias unipersonales, personas que viven solas con 65 años o más (en torno a 17.000 euros).
Pero, ¿en qué se va el dinero? Sobre todo, en el mantenimiento y conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar es el que más dinero se lleva del presupuesto anual: en torno a los 9.000 euros.
Después, las familias dedican más de 4.000 euros al año en la compra de alimentos y bebidas no alcohólicas. Le siguen los transportes (3.320, euros al año) la hostelería (hoteles, cafés y restaurantes) con un gasto de más de 2.400 euros anuales; el ocio, espectáculos y cultura (cerca de 1.600 euros) y los artículos de vestir y calzado, con un gasto de 1.400 euros al año. Por debajo del millar de euros, gastamos en salud, comunicaciones, bebidas alcohólicas, tabaco; y enseñanza, respectivamente.
Baja el gasto en ropa
En seis años (desde 2006 a 2012), la radiografía del gasto familiar ha cambiado mucho. Las familias no gastan tanto en artículos de vestir y calzado, ni tampoco en mobiliario y equipamiento del hogar: en ambos casos el gasto ha descendido en torno al 30%. Asimismo, destaca el derrumbe del gasto medio en transporte: un 26%. Por el contrario, los hogares son incapaces de controlar el aumento del gasto en vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles: en 6 años, ha crecido un nada despreciable 34%.
1 de cada 3 euros para mantener el hogar
En la hucha familiar, de cada tres euros que salen, uno está destinado al pago de la vivienda, el agua, la electricidad, el gas y otros combustibles, así como al mobiliario, equipamiento del hogar y gastos corrientes de conservación de la vivienda. En total, la factura media asciende a 10.300 euros. Por supuesto, no todas las regiones desembolsan el mismo dinero. Los hogares madrileños y vascos gastan mucho más (por encima de los 11.500 euros) que las familias extremeñas y canarias (en torno a 6.700 euros). En el transcurso de estos seis largos años, las familias españolas han sufrido un crecimiento del gasto a pesar de la crisis. De los doce grupos de gasto analizados por el INE es el correspondiente al de vivienda y su conservación el que más ha aumentado. Nada menos que en un 34%.
Pero mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos: por un lado, el pago de hipotecas o alquileres, los impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
La partida que ha crecido más ha sido la de los servicios de suministro, como la distribución del agua, el alcantarillado, los gastos comunitarios y la recogida de basuras. Ha aumentado un 32% en 6 años.
También el gasto en electricidad ha incrementado su participación en los presupuestos familiares desde 2006, especialmente con la aparición de la crisis: en 2009 el gasto creció un 21%, en 2010 un 35% y en 2011 un 45%.
Precisamente la electricidad, la fuente de energía más utilizada, es uno de los quebraderos de cabeza más importantes para las familias. Aunque en época de dificultades económicas su demanda ha caído, no lo ha hecho el precio de la factura de la luz. En ocho años, el importe de las facturas se ha disparado al menos un 70%. En 2001, por ejemplo, el consumo se redujo el 2%, pero el coste doméstico del kilovatio sin impuestos subió cerca del 13%.
Lo básico: alimentos, vestido y salud
Alimentarse, vestirse y cuidar de la salud son necesidades básicas en las que cada hogar destina una media de 6.400 euros al año, es decir, uno de cada cuatro euros que entran en la cartera de cada familia.
Por comunidades autónomas, los hogares gallegos son los que más gastan en alimentación (4.600 euros al año) y en salud (1.070 euros), y los madrileños en artículos de vestir y calzado (1.660 euros). En el extremo opuesto, los extremeños son quienes menos destinan a alimentos y bebidas no alcohólicas (3.500 euros) y a la salud (590 euros), y los canarios en artículos de vestir y zapatos (910 euros).
En los últimos 6 años, las tendencias han variado. Por un lado, el desembolso familiar en alimentos y bebidas no alcohólicas ha descendido apenas un 4%. Y es que la crisis ha provocado que los hábitos de consumo de los españoles cambien y hoy las familias buscan comprar alimentación de mejor precio y la mitad de ellas, reconoce que prefiere comprar alimentos más baratos.
La caída que muestra la pendiente más pronunciada la sufrió el gasto en ropa y calzado, casi el 32%. En 2006, se realizaba un gasto de más de 2.000 euros de media y 6 años después, esa cifra se ha reducido a 1.400 euros.
Por último, el gasto medio por hogar en salud ha aumentado en seis años apenas un 2%. Por tipo de hogar y de comunidad autónoma, destaca que sean los hogares formados por una pareja sin hijos los que más gastan en salud. La diferencia de gasto en salud entre Extremadura (la que menos gasta) y Galicia (la que más) es del 81%.
Más crisis, menos desplazamientos
Vivimos en una sociedad que se ha desarrollado porque se mueve. Somos sujetos ‘móviles’. Transportarse, comunicarse y formarse son elementos fundamentales. Todo ello supone un gasto nada desdeñable para los hogares, puesto que supone alrededor de 4.500 euros, el 16% del gasto familiar total. Entre estos servicios, el transporte es el que más peso e incidencia tiene. Se realizó un gasto medio de 3.320 euros al año en cada hogar. Por regiones, es especialmente alto en Cantabria (4.200 euros) y en la Comunidad de Madrid (3.900 euros).
Pese a su importancia, el dinero que se destina a trasladarse de un lugar a otro ha disminuido en seis años casi un 26%, aunque fue entre 2007 y 2008 cuando se produjo la mayor caída, cerca del 17%.
Y es que cada vez nos movemos menos y de forma diferente, menos vehículo privado y más transporte colectivo (autobús, metro, etc.).
Nuestro ocio incluye acudir a espectáculos y disfrutar de la cultura, a cafés y restaurantes, hacer escapadas… Además, en nuestros actos sociales también interviene el consumo de bebidas alcohólicas y tabaco. Cada hogar, gasta en todo ello unos 4.700 euros, un 16% del gasto familiar anual en 2012.
En este aspecto, son los hogares del País Vasco, la Comunidad de Madrid y Navarra los que más gastan en ocio: 3.000 euros en cafés, restaurantes y hoteles y alrededor de 2.000 euros en espectáculos y cultura. De nuevo, Extremadura y Canarias están a la cola (los hogares allí no alcanzan los 2.000 euros de media). Quienes más desembolsan en bebidas alcohólicas, tabaco y ‘otros consumos no legales’ son los hogares madrileños y andaluces (más de 640 euros de media al año).
Comunidad por comunidad
Cada familia es un mundo y el territorio en el que se encuentra también influye a la hora de realizar su gasto anual. Por eso, EROSKI CONSUMER ha querido desgranar la evolución del gasto medio por hogar en cada comunidad autónoma desde 2006 hasta 2012 y sin tener en cuenta el impacto del IPC anual:
- Andalucía: los hogares andaluces gastaron en 2012 una media de 25.615 euros, a la cola del resto de comunidades autónomas, junto con Extremadura, Canarias, Castilla-La Mancha y Castilla y León. En seis años, las familias andaluzas han contraído este gasto medio en un 23%, una tendencia que se lleva produciendo desde 2008.
- Aragón: las familias aragonesas realizaron un gasto medio en 2012 de 28.003 euros, cerca de la media del estudio (28.151 euros). En seis años, ese presupuesto ha disminuido un 17%, aunque la peor caída se produjo entre 2008 y 2009.
- Asturias: el gasto medio por hogar en Asturias fue de 26.096 euros, por debajo de la media del estudio (28.151 euros) y solo por encima del gasto de siete comunidades autónomas. Desde 2006 y hasta 2012, ha caído este desembolso un 20%, aunque la peor caída se produjo entre 2010 y 2011.
- Baleares: entre las regiones con mayor gasto se encuentran los hogares baleares que en 2012, gastaron 28.459 euros. Por encima de la media del estudio. Sin embargo, en 2006, su presupuesto era de 32.181 euros, por lo que en seis años se ha contraído un 23%. Especialmente dura fue la caída entre 2008 y 2009.
- Canarias: los hogares canarios tienen el segundo gasto medio más bajo (22.793 euros) solo por delante de los extremeños (22.218 euros). Un presupuesto que ha ido en descenso prácticamente desde 2006. En los seis años que han transcurrido hasta 2012, ha sufrido una caída del 31%, la más significativa el estudio.
- Cantabria: las familias cántabras gastaron una media de 28.935 euros en 2012. Se sitúan por encima de la media (28.151 euros) y en el quinto lugar del ránking de las que más gastan. Entre 2006 y 2012, ese presupuesto familiar cayó un 15%, aunque lleva cayendo desde 2009, momento en el que se gastó una media de 32.270 euros.
- Castilla y León: desde 2006 hasta 2012, el gasto medio en los hogares castellanoleoneses ha disminuido casi un 19%. Se sitúa ahora en los 25.444 euros, por debajo de la media nacional y el cuarto por la cola en el ranking de comunidades autónomas (solo por encima de Castilla-La Mancha, Canarias y Extremadura).
- Castilla-La Mancha: los hogares manchegos gastan uno de los montantes más reducidos del estudio, una media de 24.320 euros. Tan solo la superan Extremadura y Canarias. El descenso desde 2007 ha sido más o menos regular, aunque hubo momentos de recuperación entre 2009 y 2010. Después, entre 2011 y 2012, la caída fue más fuerte.
- Cataluña: los catalanes redujeron su gasto más del 22% durante seis años. En 2008, alcanzaron la cifra más alta de gasto medio por hogar, 34.511 euros, pero desde entonces no ha parado de bajar hasta los 29.960 euros de 2012.
- Comunidad Valenciana: desde el año 2007, el gasto medio de los hogares valencianos no ha parado de caer. En total, un 24% en seis años. De los 30.872 euros de 2006 han pasado a gastar una media de 26.037 euros en 2012.
- Extremadura: los hogares extremeños son los que menos gastaron el pasado año 2012, 22.218 euros de media al año. Se sitúa muy por debajo de la media del estudio, 28.151 euros. En seis años, la caída de este gasto ha sido de un 22%, lleva desde 2007 en descenso, aunque el más importante se produjo entre 2011 y 2012.
- Galicia: Galicia se encuentra en la media del estudio en gasto medio por hogar, incluso algo menor. En 2012, esa cifra se situó en 27.205 euros, aunque en 2008 (su momento álgido) llegó a los 30.149 euros. A pesar de una pequeña recuperación tres años más tarde, durante el periodo entre 2006 y 2012 el presupuesto familiar ha disminuido un 17%.
- La Rioja: en seis años, los hogares riojanos han disminuido su gasto un 16%. Ese presupuesto familiar supuso en 2012 una media de 26.176 euros, por debajo de la nacional (28.151 euros) y por detrás de diez comunidades autónomas.
- Comunidad de Madrid: 34.766 euros de media gastó en 2012 cada hogar madrileño. Es la cifra más alta del estudio. Aun así, su evolución en 6 años ha sido decreciente, un 15%. Sin embargo, en ese periodo se han sucedido varias caídas y recuperaciones, la peor entre 2008 y 2009.
- Murcia: los hogares murcianos gastaron en 2012 una media de 27.372 euros, una cantidad por debajo de la media general. En 6 años, se ha producido un descenso de 20%, aunque en los últimos (2011 y 2012) el desembolso familiar se ha recuperado ligeramente (aunque sin llegar a niveles de 2007, momento en el que el gasto medio por hogar suponía 32.219 euros).
- Navarra: los navarros han contraído el gasto en 6 años casi el 20%. No se recupera desde 2008, cuando la cifra alcanzó los 36.036 euros. Ahora es de 31.646 euros. Aun así, se sitúa entre las comunidades con un gasto mayor, solo por detrás de Madrid y País Vasco.
- País Vasco: las familias vascas gastaron en 2012 una media de 33.118 euros, muy por encima de la del estudio y es la segunda comunidad con un presupuesto mayor. En seis años, el gasto familiar ha descendido un 13%, aunque se han producido varios altibajos en ese periodo.
Las ciudades, una a una
- Andalucía
- Aragón
- Asturias
- Baleares
- Canarias
- Cantabria
- Castilla La Mancha
- Castilla y León
- Cataluña
- Extremadura
- Galicia
- La Rioja
- Madrid
- Murcia
- Navarra
- País Vasco
- Valencia
Sigue sin ser el mejor momento para muchas familias en España. Según la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística (INE), un 17% de los hogares españoles manifestó llegar a fin de mes con mucha dificultad en 2013 y otro 9% también reconoce que se está retrasando a la hora de realizar pagos relacionados con la vivienda principal. La crisis golpea con fuerza desde su inicio: dos de cada cinco familias no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos y menos aún, para irse de vacaciones fuera de su casa una semana al año. Lo peor: estos datos no han dejado de agravarse desde hace tres años.
Ante esta situación, EROSKI CONSUMER ha querido indagar cuánto y cómo gastan las familias españolas, así como la evolución de su gasto familiar desde 2006 a 2012, un periodo fundamental que transcurre por la difícil crisis económica. También se han analizado los datos comunidad por comunidad. Toda esta información se ha obtenido a partir de la Encuesta de Presupuestos Familiares que año a año publica el INE.
Andalucía
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 25.615 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En Andalucía, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 25.615 euros, un 9% por debajo de la media nacional (28.151 euros). Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2008, año en el que se superaron los 30.600 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012), la contracción ha sido del 9%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio andaluz se derrumba un 23%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias andaluzas, 8.835 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares andaluces gastan una media de 6.240 euros. En tercer lugar, está el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que se llevan una media de 4.340 euros y, por último otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que supusieron 4.270 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Andalucía ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido el gasto en vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 25%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias andaluzas han disminuido su gasto especialmente en mobiliario, equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación de la vivienda (nada menos que un 39%), en artículos de vestir y calzado (un 35%) y en transportes (un 28%).
Aragón
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 28.000 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En Aragón, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 28.003 euros, apenas un 1% por debajo de la media nacional (28.151 euros). Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2008, año en el que se superaron los 30.300 euros de media, aunque hubo una pequeña recuperación en 2010. Aun así, en seis años (desde 2006 hasta 2012), la contracción ha sido del 1%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio aragonés se derrumba un 16%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias aragonesas, en torno a los 10.690 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares aragoneses gastan una media de 6.570 euros. En tercer lugar, está el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que se llevan una media de 4.730 euros y, por último otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que supusieron 4.120 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Aragón ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido el gasto en salud (nada menos que un 42%) y también en vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 21%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias aragonesas han disminuido su gasto especialmente en artículos de vestir y calzado (nada menos que un 30%) y en transportes (un 26%).
Asturias
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 26.000 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En Asturias, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 26.096 euros, un 7% por debajo de la media nacional (28.151 euros). Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2010, año en el que se superaron los 31.300 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012), la contracción ha sido del 5%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio asturiano se derrumba un 20%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias asturianas, 9.815 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares asturianos gastan una media de 5.985 euros. En tercer lugar, está el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que se llevan una media de 4.630 euros y, por último, están otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que supusieron 3.740 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Asturias ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido el gasto en enseñanza (un 29%) y aún más en vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 37%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias asturianas han disminuido su gasto especialmente en artículos de vestir y calzado y en transportes (un 30% en ambos casos).
Baleares
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 28.400 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En las Islas Baleares, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 28.459 euros, un 1% por encima de la media nacional (28.151 euros). Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2007, año en el que se superaron los 35.000 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012), la contracción ha sido del 11%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio balear se derrumba un 23%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias baleares, en torno a los 11.240 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares baleares gastan una media de 5.550 euros. En tercer lugar, están otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones se llevan una media de 4.950 euros y, por último el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) supusieron 4.370 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en las Islas Baleares ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido el gasto en enseñanza (un 17%) y en vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 19%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos influenciados por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias baleares han disminuido su gasto especialmente, en hostelería (hoteles, cafés y restaurantes, un 36%); en ocio, espectáculos y cultura (un 35%) y en artículos de vestir y calzado (un 32%).
Canarias
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 22.700 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En Canarias, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 22.793 euros, un 19% por debajo de la media nacional (28.151 euros). Es el segundo presupuesto más bajo del estudio. Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2007, año en el que se superaron los 29.700 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012), la contracción ha sido del 18%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio canario se derrumba un 31%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Extremadura (allí no alcanza los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias canarias, en torno a los 7.870 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares canarios gastan una media de 5.300 euros. En tercer lugar, están otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que se llevan una media de 4.290 euros y, por último, el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que supusieron 3.480 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Canarias ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido el gasto en enseñanza (un 30%) y también la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (un 8%).
Por el contrario, las familias canarias lo han disminuido especialmente en artículos de vestir y calzado (nada menos que un 49%), en ocio y hostelería (en torno al 34%), mobiliario y equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación del hogar (un 33%) y en transportes (un 32%).
Cantabria
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 28.935 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En Cantabria, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 28.935 euros, un 3% por encima de la media nacional (28.151 euros). Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2009, año en el que se superaron los 32.200 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012) la contracción ha sido del 1%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio cántabro se derrumba un 14%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias cántabras, en torno a los 10.680 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares cántabros gastan una media de 6.320 euros. En tercer lugar, están otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que se llevan una media de 5.260 euros y, por último, el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que supuso 4.520 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Cantabria ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 37%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias cántabras han disminuido su gasto especialmente en artículos de vestir y calzado, así como en mobiliario, equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación de la vivienda (en ambos casos un 22%). También en hoteles, cafés y restaurantes (un 19%), en transportes (un 14%) y en ocio, espectáculos y cultura (un 13%).
Castilla-La Mancha
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 24.320 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En Castilla-La Mancha, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 24.320 euros, un 14% por debajo de la media nacional (28.151 euros). Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2007, año en el que se superaron los 28.330 euros de media (con una pequeña recuperación en 2009). En seis años (desde 2006 hasta 2012) la contracción ha sido del 6%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio manchego se derrumba un 20%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias manchegas, en torno a los 8.910 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado y la salud. En esta partida, los hogares manchegos gastan una media de 5.930 euros. En tercer lugar, están otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que se llevaron una media de 3.950 euros y, por último, el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que supusieron 3.800 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Castilla-La Mancha ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 25%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos influenciados por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias manchegas han disminuido su gasto especialmente en mobiliario, equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación de la vivienda (un 37%), en hostelería (hoteles, cafés y restaurantes, un 35%), en artículos de vestir y calzado (un 30%) y en transportes (un 24%).
Castilla y León
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 25.440 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En Castilla y León, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 25.444 euros, un 10% por debajo de la media nacional (28.151 euros). Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2008, año en el que se superaron los 29.380 euros de media (con una pequeña recuperación en 2010). En seis años (desde 2006 hasta 2012) la contracción ha sido del 6%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio castellanoleonés se derrumba un 19%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias castellanas, en torno a los 9.240 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares castellanos gastan una media de 6.150 euros. En tercer lugar, está el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que se llevó una media de 4.230 euros y, por último, otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que supusieron 4.000 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Castilla y León ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 29%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias castellanoleonesas han disminuido su gasto especialmente en mobiliario, equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación de la vivienda (un 38%), en artículos de vestir y calzado (un 33%), en transportes (un 25%) y en hostelería (hoteles, cafés y restaurantes, un 20%).
Cataluña
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 29.960 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En Cataluña, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 29.960 euros, un 6% por encima de la media nacional (28.151 euros). Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2008, año en el que se superaron los 34.500 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012) la contracción ha sido del 10%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio catalán se derrumba un 22%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias catalanas, en torno a los 11.390 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades primarias como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares catalanes gastan una media de 6.800 euros. En tercer lugar, está el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que se llevan una media de 4.760 euros y, por último, otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que supusieron 4.690 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Cataluña ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 12%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos influenciados por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias catalanas han disminuido su gasto especialmente en artículos de vestir y calzado (nada menos que un 37%), en transportes (un 28%), en mobiliario, equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación de la vivienda (un 27%) y en ocio, espectáculos y cultura (un 21%).
Extremadura
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 22.210 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En Extremadura, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 22.218 euros, un 21% por debajo de la media nacional (28.151 euros). Es la cifra más baja del estudio, nada menos que un 36% más que la más alta del informe: la de Madrid, de 34.766 euros de media. Además, da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2007 (con una pequeña recuperación en 2009), año en el que se superaron los 25.770 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012), la contracción ha sido del 7%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio extremeño se derrumba un 22%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias, el segundo territorio donde menos gasto hubo después de Extremadura (allí tampoco alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias extremeñas, en torno a los 7.760 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares extremeños gastan una media de 5.400 euros. En tercer lugar, están otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que se llevan una media de 3.800 euros y, por último, el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que supusieron 3.500 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Extremadura ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido la enseñanza (un 30%) y también la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 41%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos influenciados por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias extremeñas han disminuido su gasto especialmente en hostelería (hoteles, cafés y restaurantes, un 38%), artículos de vestir y calzado (37%) y mobiliario, equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación de la vivienda (un 36%)
Galicia
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 27.200 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En Galicia, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 27.205 euros, un 3% por debajo de la media nacional (28.151 euros). Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2008 (con una pequeña recuperación en 2010), año en el que se superaron los 30.100 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012) la contracción ha sido del 3%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio gallego se derrumba un 17%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias gallegas, en torno a los 9.277 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares gallegos gastan una media de 7.340 euros. En tercer lugar, están otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que se llevan una media de 4.310 euros y, por último, el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que supusieron 4.210 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Galicia ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido el gasto en salud (nada menos que un 29%) y también el de vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 28%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos derivados de las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias gallegas han disminuido su gasto especialmente en artículos de vestir y calzado (un 28%), en transportes (un 27%) y en mobiliario, equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación de la vivienda (un 24%).
La Rioja
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 26.170 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En La Rioja, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 26.176 euros, un 7% por debajo de la media nacional (28.151 euros). Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2007 (con una recuperación en 2010), año en el que se superaron los 29.360 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012), la contracción ha sido del 2%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio riojano se derrumba un 16%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias riojanas, en torno a los 9.750 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares riojanos gastan una media de 6.090 euros. En tercer lugar, está el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que se llevan una media de 4.570 euros y, por último, otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que supusieron 3.690 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en La Rioja ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 22%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos influenciados por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera. También ha aumentado el gasto en comunicaciones (un 215).
Por el contrario, las familias riojanas han disminuido su gasto especialmente en artículos de vestir y calzado (nada menos que un 46%), en mobiliario, equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación de la vivienda (un 29%) y en transportes (un 22%).
Madrid
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 34.760 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En la Comunidad de Madrid, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 34.766 euros, un 23% por encima de la media nacional (28.151 euros). Y es que es la región con mayor gasto del estudio, un 56% más que el más pequeño del informe: se encuentra en Extremadura.
Sin embargo, da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2008 (con una pequeña recuperación en 2010), año en el que se superaron los 37.800 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012), la contracción ha sido del 2%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio madrileño se derrumba un 15%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 31.000 euros, siempre por debajo de Madrid) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias madrileñas, 13.420 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares madrileños gastan una media de 6.900 euros. En tercer lugar, está el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que se llevan una media de 6.110 euros y, por último, otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que supusieron 5.490 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Madrid ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido el gasto en enseñanza (nada menos que un 34%) y también la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 18%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos influenciados por la inflación: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones, etc. También destaca el gasto en salud porque crece un 12%.
Por el contrario, las familias madrileñas han disminuido su gasto especialmente en mobiliario, equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación de la vivienda (un 30%), en artículos de vestir y calzado (nada menos que un 23%), en ocio, espectáculos y cultura (18%) y en transportes (un 15%).
Murcia
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 27.370 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En la Región de Murcia, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 27.372 euros, un 3% por debajo de la media nacional (28.151 euros). Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2007 (con pequeña recuperación en 2011), año en el que se superaron los 32.200 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012), la contracción ha sido del 8%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio murciano se derrumba un 20%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias murcianas, en torno a los 9.450 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares murcianos gastan una media de 6.840 euros. En tercer lugar, está el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que se llevan una media de 4.480 euros y, por último, otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que supusieron 4.390 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Murcia ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido la enseñanza (un 27%) y también la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 32%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos influenciados por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias murcianas han disminuido su gasto especialmente en transportes (nada menos que un 38%), en artículos de vestir y calzado (un 34%), en mobiliario, equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación de la vivienda (un 25%) y en ocio, cultura y espectáculos (un 21%).
Navarra
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 31.640 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En Navarra, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 31.646 euros, un 12% por encima de la media nacional (28.151 euros) y la tercera cifra más alta del estudio solo por detrás de la de los hogares madrileños y vascos. Aun así, da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2008, año en el que se superaron los 36.000 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012), la contracción ha sido del 8%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio navarro se derrumba un 20%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid y País Vasco (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias navarras, en 11.875 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares navarros gastan una media de 6.940 euros. En tercer lugar, está el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que se llevan una media de 5.650 euros y, por último, otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que supusieron 5.000 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Navarra ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 19%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos influenciados por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias navarras han disminuido su gasto especialmente en transportes (33%); ocio, espectáculos y cultura, y artículos de vestir y calzado (en ambos casos un 25%); en mobiliario, equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación de la vivienda y en salud (en ambos casos, un 23%).
País Vasco
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 33.118 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En el País Vasco, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 33.118 euros, un 18% por encima de la media nacional (28.151 euros). Se coloca así como la segunda comunidad del estudio que destina un mayor presupuesto. En seis años (desde 2006 hasta 2012), la tendencia en el gasto en las familias vascas no ha sido constante, sino todo lo contrario. En 2008, se logró la cifra más alta (34.200 euros) y después de unos años de fluctuación, a partir de 2011 comenzó su descenso hasta los 33.110 de 2012. En definitiva, si se elimina el impacto del IPC anual, en este periodo se ha producido una contracción del 13%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 34.700 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias vascas, en torno a los 13.030 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares vascos gastan una media de 7.100 euros. En tercer lugar, está el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas y otras sustancias) que se llevan una media de 5.880 euros y, por último, otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que supusieron 4.680 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 26%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias vascas han disminuido su gasto especialmente en transporte (en un 24%), en artículos de vestir y calzado (un 22%) y en ocio, espectáculos y cultura (un 17%).
Valencia
Analizada la estructura del gasto familiar en 17 comunidades autónomas
Cada hogar desembolsó en 2012 una media de 26.030 euros y una tercera parte lo destinó a la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles
En la Comunidad Valenciana, el gasto medio por hogar en 2012 ascendió a 26.037 euros, un 7% por debajo de la media nacional (28.151 euros). Da vértigo echar la vista atrás porque se observa una caída libre desde 2007, año en el que se superaron los 30.800 euros de media. En seis años (desde 2006 hasta 2012), la contracción ha sido del 10%, una situación que se agrava si se elimina el impacto del IPC anual. En ese caso, el gasto familiar en territorio valenciano se derrumba un 24%.
Si se lanza una mirada hacía el resto de comunidades autónomas, los extremos se encuentran, por un lado, en Madrid, País Vasco y Navarra (donde los hogares realizan un gasto medio por encima de los 30.000 euros) y por el otro, en Canarias y Extremadura (allí no alcanzan los 23.000 euros de media).
Mayor gasto: en vivienda
Y ¿en qué se va el dinero? Sobre todo en el mantenimiento y la conservación de la vivienda, así como en otros gastos como la luz o la electricidad. El hogar y todo lo que le rodea es el que más dinero se lleva del presupuesto anual de las familias valencianas, en torno a los 9.170 euros de media.
En segundo lugar, se encuentran las necesidades básicas como la alimentación y bebidas no alcohólicas, los artículos de vestir y calzado, y la salud. En esta partida, los hogares valencianos gastan una media de 5.950 euros. En tercer lugar, está el ocio (hostelería, espectáculos y cultura, y bebidas alcohólicas) que se llevó una media de 4.570 euros y, por último, otras necesidades como la enseñanza, los transportes y las comunicaciones que supusieron 4.260 euros del gasto total de las familias.
Seis años y una crisis
En seis años, desde 2006 hasta 2012, la radiografía del gasto familiar en Valencia ha cambiado mucho. A pesar de las dificultades económicas que ha traído consigo la crisis, la partida que más ha aumentado en el transcurso de este periodo ha sido el gasto en enseñanza (nada menos que un 35%) y también la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 17%. Y es que mantener y conservar una vivienda supone acometer importantes desembolsos por las continuas inflaciones: hipotecas o alquileres, impuestos ligados a la vivienda (IBI, limpieza, basuras, alcantarillado, etc.), gastos corrientes de luz, agua y calefacción; reparaciones y un largo etcétera.
Por el contrario, las familias valencianas han disminuido su gasto especialmente en mobiliario, equipamiento del hogar y otros gastos corrientes de conservación de la vivienda (un 37%), artículos de vestir y calzado (un 30%), en transportes (un 27%) y en ocio y hostelería (entorno al 24% en ambos casos).