Cremas de cacao

Demasiado azúcar y poco cacao

Protagonistas de muchas meriendas infantiles, estos productos presumen de tener ingredientes como frutos secos o leche. Sin embargo, su alto contenido en azúcar y grasa las hace solo recomendables para contadas ocasiones.
1 septiembre de 2022

Cremas de cacao. Demasiado azúcar y poco cacao

Si viajamos en el tiempo hasta la década de los ochenta será fácil que nos topemos con un anuncio publicitario de alguna crema de cacao. En esas fechas estos productos comenzaron a hacerse populares. Se promocionaban como alimentos con buenos ingredientes (leche, cacao y avellanas) enfocados a la elaboración de meriendas infantiles y se asociaban con aspectos positivos, transmitiendo la idea de que aportaban energía y eran adecuados para el crecimiento de los menores. Ha pasado mucho tiempo desde entonces, pero este producto sigue muy presente en los bocadillos y sándwiches de muchos niños y niñas. Lejos de caer en el olvido, su consumo ha aumentado en los últimos años. Para hacernos una idea, en la primera década de este siglo el consumo medio por español estaba entre los 310 g y los 330 g por año, una cantidad que hoy en día se encuentra alrededor de los 400 g por año, es decir, lo que equivale a un envase mediano. De todos modos, estas cifras debemos interpretarlas con cautela, porque son valores promedio, ya que hay personas que nunca consumen estos productos, mientras que otras los toman casi a diario.

El éxito de este tipo de cremas radica principalmente en sus características organolépticas: tienen un intenso sabor dulce, en el que predominan el cacao y la avellana, y una textura característica que hace que podamos untarlas sobre una rebanada de pan y que, además, resulta muy untuosa en la boca. Dichas características dependen estrechamente de los ingredientes que contienen y de la proporción en la que se encuentran. Por ejemplo, la textura será más sólida en las cremas compuestas por aceite de palma, como Nutella, que en aquellas en las que predomina el aceite de girasol, como Nocilla. 

En este sentido, la elección de una u otra marca dependerá sobre todo de nuestros gustos personales. Pero más allá de eso, hay elementos objetivos que deberíamos considerar a la hora de hacer la compra. 

Diferencias a primera vista

Estos productos parecen muy similares si tenemos en cuenta su aspecto y su diseño. Se trata de cremas que se comercializan en tarros transparentes en los que se muestran imágenes del producto sobre rebanadas de pan, acompañado de algunas avellanas. En este sentido, las cremas que presentan diferencias claramente apreciables sobre el resto son las que tienen dos sabores, como Nocilla ChocoLeche y Eroski, dado que están compuestas por una combinación de dos cremas, una de cacao y otra de color blanco, que, a diferencia de la anterior, no contiene cacao magro, sino manteca de cacao y leche. 

Para conocer todos estos productos en detalle, conviene consultar el etiquetado. De entrada, la primera información en la que deberíamos detenernos es la denominación de venta. Normalmente se muestra junto a la lista de ingredientes y nos informa acerca de sus características generales. Por ejemplo, en todos ellos se indica “crema de cacao” y en algunos se especifican, además, otros detalles, como el contenido de cacao, avellanas u otros ingredientes. Por ejemplo, en la crema Valsoia se indica “crema para untar de avellanas y cacao con soja”.

Análisis

Para realizar esta guía de compra se seleccionaron cremas de cacao elaboradas por marcas líderes en el mercado, en las que se analizó principalmente:

  • Puntuación Nutri-Score. La valoración viene determinada por la cantidad de azúcares y la proporción de grasas.
  • Los ingredientes. Para conocer la calidad comercial, especialmente en lo que respecta a la proporción de ingredientes apreciados, como cacao, avellanas o leche, y el tipo de grasa empleada.
  • La información comercial. Analizamos si es honesta y cumple la legislación o si por el contrario es confusa o resulta engañosa.
  • Precio. No fue un criterio para evaluar la calidad, pero la relación calidad-precio se ha tenido en cuenta para las posiciones del ranking.
  • El etiquetado. Se analizó si cumple la legislación.

El azúcar es el protagonista

Sin duda, donde encontraremos la información más importante es en la lista de ingredientes. Para poder interpretarla adecuadamente conviene saber que deben citarse en orden, según su importancia en el producto. Es decir, si el primer ingrediente es el azúcar, significa que es el que se encuentra en mayor proporción. Es lo que ocurre en todos los productos analizados, así que esto ya nos da una pista de sus características nutricionales. La proporción de este nutriente se encuentra entre el 50% de Veritas y el 58% de Nocilla ChocoLeche.

El único matiz lo encontramos en la crema Veritas, que contiene azúcar moreno en lugar de blanco. A diferencia de lo que se suele creer, las diferencias entre ambos son insignificantes desde el punto de vista nutricional, ya que los dos están compuestos básicamente por sacarosa. Así pues, la sustitución del azúcar blanco por azúcar moreno no hace que el producto sea más saludable. Lo que sí puede hacer es que el sabor sea ligeramente diferente, algo que debemos tener en cuenta para elegir en función de nuestros gustos personales. 

Materia grasa, aceites y manteca

El segundo ingrediente en importancia es la materia grasa. Es lo que ocurre en todos los productos, salvo en Veritas, en el que ocupa la tercera posición, detrás del azúcar y el cacao. Todas las cremas contienen aceite de girasol y manteca de cacao, salvo Natra, que tiene aceite de colza y de palma, y Nutella, con aceite de palma. 

La combinación de materias grasas se hace por motivos nutricionales y organolépticos: el aceite de girasol y el aceite de colza son más saludables que las grasas sólidas o semisólidas, como el aceite de palma o la manteca de cacao, debido a su mayor proporción de grasas insaturadas. Pero, por otra parte, esto hace que las primeras sean líquidas a temperatura ambiente, así que no aportan buena textura al producto, como sí hacen el aceite de palma y la manteca de cacao, que, al tener una mayor proporción de grasas saturadas, son más sólidas y por eso aportan la untuosidad tan característica de estas cremas.

Lo más valorado: cacao y avellanas

En estas cremas los ingredientes más apreciados son, sin duda, el cacao y las avellanas. Ambos se suelen destacar en la etiqueta, ya sea en forma de imágenes o con palabras, y también se mencionan habitualmente en la denominación de venta. Por eso en la lista de ingredientes se especifica la proporción en la que se encuentran, tal y como establece la legislación. 

Si nos fijamos en la proporción de cacao podemos hacer tres grupos de productos: los que contienen una proporción de en torno al 4%-5%, como Nocilla ChocoLeche, Natra, Milka y Eroski 2 sabores; los que aportan una proporción de en torno al 7%-8,5%, como Nocilla original, Nutella y Eroski, y los productos con una proporción más alta, entre el 11% y el 19,8%, como Valsoia, Nocilla Noir y Veritas. El contenido de cacao influye sobre el sabor y el precio. 

El contenido de avellanas se encuentra en la mayoría de los productos en torno al 4%-5%, como en Nocilla, Eroski 2 sabores y Milka. Destacan Nutella, Valsoia y Eroski, que son las cremas que presentan las proporciones más altas, entre el 13% y el 14%. Por otra parte, Natra contiene tan solo un 2% de este fruto seco. En la crema Veritas no se especifica esta información porque, al no destacar la presencia de avellanas en el envase, no tiene obligación de indicar la cantidad. Esto podría ser señal de que no se encuentran en una proporción elevada, porque de lo contrario lo habitual es destacarlo. En cualquier caso, no tenemos forma de confirmarlo. En el extremo opuesto se encuentran las cremas de Eroski, que destacan la proporción de avellanas en la parte frontal del envase, lo que facilita conocer este dato de un simple vistazo.

¿Cremas de cacao saludables?

En la etiqueta de algunos productos se hacen referencias a las características nutricionales. Por ejemplo, en Valsoia se indica “rica en fibra”, en Nocilla original y Nocilla ChocoLeche se muestra “-35% de grasas saturadas” y en esta última se indica también “fuente de calcio”, debido a su contenido en leche. Además, varias destacan la ausencia de aceite de palma (Nocilla y Eroski) o la presencia de aceite de girasol (Milka). 

En principio, podríamos pensar que todos estos aspectos son positivos y que lo deseable sería elegir las cremas que tienen mejores ingredientes (por ejemplo, aceite de girasol frente a aceite de palma) y las que tienen un mejor perfil nutricional (como las que contienen menos proporción de azúcares y mejor perfil de ácidos grasos). Pero no debemos olvidar que todos los productos analizados en esta guía están compuestos por una elevada cantidad de azúcar, que en el mejor de los casos supone un 50% de la composición y eso no se ve compensado por el hecho de tener mucha fibra. Así pues, conviene tenerlo presente para destinarlos a un consumo ocasional. Si lo hacemos de este modo y en el contexto de una dieta saludable, su impacto sobre la salud no debería ser significativo. Debemos concebirlos como productos que consumimos únicamente para el disfrute y en ocasiones puntuales, no para nutrirnos ni de forma habitual.

No todas tienen leche

La leche también es, junto con el cacao y las avellanas, otro de los ingredientes apreciados que podemos encontrar en estos productos. Esto es lo que ocurre en Nocilla ChocoLeche, Eroski 2 sabores, Nocilla original, Nutella, Milka y Eroski. En todas ellas se utiliza leche desnatada en polvo. Natra también contiene un ingrediente lácteo, concretamente lactosuero en polvo, que es menos apreciado y más barato que la leche. Así pues, las únicas cremas que no incorporan ingredientes lácteos son Nocilla Noir, Valsoia y Veritas. La presencia de leche o lactosuero influye sobre las características organolépticas, porque estos ingredientes hacen que el color de la crema sea más claro y el sabor más suave. También contribuyen a abaratar el producto, porque generalmente se utiliza menos proporción de cacao, que es uno de los ingredientes más caros.

Nutrientes que hay que vigilar

Además de la alta cantidad de azúcar, también es muy importante la proporción de grasas de estos productos, que se encuentra en torno al 32%. Destaca Veritas, que es la que tiene el valor más bajo, con un 25%, y Natra, con el valor más alto, un 37%. En todas ellas la materia grasa está compuesta por aceites, sobre todo de girasol, y manteca de cacao. Los primeros se encuentran en una mayor proporción, lo que explica que en la mayoría de las cremas la proporción de grasas saturadas no sea exageradamente alta, rondando el 6% en casi todos los casos. Destacan Natra y Nutella, con un 8% y un 10%, respectivamente, debido a su contenido en aceite de palma, que es menos interesante desde el punto de vista de la salud.

El elevado contenido en azúcares y grasas determina el alto aporte calórico de estas cremas, que se encuentra en torno a 540 kilocalorías por cada 100 gramos de producto. Todo ello explica, además, las calificaciones en el sistema Nutri-Score, en el que la mitad de los productos obtienen una E, mientras que el resto puntúa con una D. En estos últimos la nota mejora ligeramente con respecto a los primeros debido, sobre todo, a que tienen un mayor contenido en fibra.

Lo que encontramos en una ración

Conocer los valores nutricionales de los productos por cada 100 gramos resulta muy útil para hacer comparaciones y para hacernos idea de sus características. Pero esa cantidad equivale aproximadamente a un tercio de un envase mediano, una cantidad considerable, que no es habitual para consumir en una sola ingesta. 

Para tener una idea más certera de lo que consumimos en una sola toma conviene considerar la cantidad de nutrientes por ración. Pero aquí nos encontramos con una pequeña dificultad: el tamaño de una ración puede variar mucho de unas personas a otras. Por tomar una referencia, podemos considerar una cantidad de 30 gramos, tal y como se muestra en las etiquetas de algunos productos. De este modo, la cantidad de grasas, azúcares y energía supone la tercera parte de las cifras señaladas anteriormente para 100 gramos de producto, pero aún así se trata de cantidades muy considerables. Es decir, una ración de producto contiene unos 10 gramos de grasas (equivalente a dos cucharaditas), 17 gramos de azúcares (casi cuatro cucharaditas) y aporta unas 160 kilocalorías, equivalente a la energía que aportan dos yogures naturales sin azúcar, que representan una alternativa más saludable.

Envases reutilizables

Como consumidores cada vez somos más exigentes a la hora de elegir lo que compramos, así que ya no nos fijamos solo en el producto en sí, es decir, en su composición o su sabor, sino que también nos centramos en otros aspectos. Uno de los que ha ganado más importancia en los últimos años es el impacto ambiental, y aquí los envases cobran especial relevancia. En las cremas de cacao analizadas, todos los envases son de vidrio, pero hay una particularidad que diferencia unos de otros. Los de algunos productos, como Natra, Milka y Eroski, tienen una tapadera de rosca, así que una vez que los consumimos, podemos reutilizar esos envases para otros fines (por ejemplo, para almacenar frutos secos). Por su parte, los envases de Nocilla, Nutella, Valsoia y Veritas están cerrados con una tapadera de plástico a presión y su forma y tamaño permite que, una vez terminado el producto, podamos reutilizarlos como vaso, lo cual es una ventaja añadida.

¿Mejor sin azúcar?

Uno de los elementos que hacen que estas cremas sean poco recomendables es, sin duda, su elevado contenido en azúcar, que en los productos analizados supone al menos la mitad de la composición. Por eso en el mercado existen alternativas que en principio parecen más saludables. Entre ellas se encuentran las cremas sin azúcares añadidos, que están elaboradas con edulcorantes. Estos compuestos presentan ciertas ventajas sobre el azúcar (por ejemplo, la mayoría son acalóricos y no producen caries), pero suelen generar desconfianza porque existen numerosos mitos y bulos que alertan sobre su supuesta falta de seguridad. Sin embargo, hay que aclarar que todos ellos son seguros. Eso sí, podrían presentar ciertos inconvenientes, afectando a nuestra microbiota intestinal o a nuestro mecanismo de saciedad, así que no serían una alternativa definitiva como sustitutos del azúcar. Y sobre todo, su mera presencia no hace que una crema de cacao sea saludable. 

A la hora de valorar un alimento no solo hay que tener en cuenta los “nutrientes perjudiciales” que aporta, sino también otros aspectos, como los “nutrientes saludables” que no aporta o el uso que vamos a hacer de ellos, ya que pueden desplazar el consumo de otros alimentos que sí son indudablemente saludables. Por ejemplo, si elegimos un bocadillo de cacao para merendar, estaremos dejando de lado otros alimentos más interesantes, como fruta fresca o frutos secos. En definitiva, al igual que  ocurre con las cremas que contienen azúcar, las cremas con edulcorantes también deberíamos destinarlas a un consumo ocasional.

Hasta seis veces más caro

El precio de estos productos parece estar relacionado con la proporción de avellanas y, sobre todo, con la de cacao, dado que son ingredientes de alto valor económico. Así, las cremas más caras son Valsoia (1,75 €/100 g, con 11% de cacao y 14% de avellanas), Nocilla Noir (1,44 €/100 g, con 17% de cacao y 4% de avellanas) y Veritas (1,26 €/100 g, con 19,8% de cacao). Sin embargo, el producto más caro, Valsoia, cuesta casi seis veces más que el más barato, Natra. Aunque en su composición hay notables diferencias –el primero tiene aceite de girasol y manteca de cacao, un 11% de cacao y un 14% de avellanas, mientras que el segundo tiene aceite de colza y de palma, un 5% de cacao y un 2% de avellanas–, estas no parecen justificar una disparidad de precio tan grande. Eroski, que tiene una composición similar al más caro (aceite de girasol, manteca de cacao, 7,5% de cacao y 13% de avellanas), se vende por un importe más de tres veces menor (0,56 €/100 g).

Recomendaciones de compra

  • Ingredientes más apreciados. Consulta la etiqueta para conocer la proporción en la que se encuentran el cacao y las avellanas. Cuanto más, mejor.
  • Tipo de materia grasa. Mejor elegir una mezcla de manteca de cacao y de aceite de girasol o de colza, en lugar de aceite de palma.
  • La cantidad de azúcar. Lo ideal sería que fuera baja, pero suele rondar el 50%-58%, así que normalmente las diferencias no son muy significativas.

Conclusiones

La lógica puede llevarnos a elegir los productos con menos proporción de azúcar, así que nos quedaríamos con Veritas, con un 50%, que es un 8% menos de la que más azúcar tiene (Nocilla ChocoLeche, con un 58%). Pero si nos fijamos en la proporción por ración, la diferencia es casi insignificante: 15% de la primera frente a 17% de la segunda. Dicho de otro modo, la proporción de azúcares no marca diferencias entre los distintos productos.

La materia grasa sí puede ser un elemento más decisivo. La mayoría de las cremas analizadas están compuestas por una mezcla de aceite de girasol y manteca de cacao. Las excepciones son Natra y Nutella, con aceite de palma, una opción menos recomendable desde el punto de vista nutricional y organoléptico.

Otro de los factores más determinantes a la hora de establecer diferencias es la proporción de cacao y avellanas. En este sentido, los productos con las mayores proporciones son Valsoia, Veritas y Nocilla Noir, pero son también los más caros. Si consideramos la relación calidad-precio, la mejor opción es Eroski, que contiene un 7,5% de cacao, un 13% de avellanas y tiene un precio de 0,56 €/100 g.

¿Cuánto se gasta al año?

Valsoia 27,2 €

Nocilla Noir 22,4 €

Veritas 19,6 €

Nocilla ChocoLeche 17,2 €

Nocilla original 17,2 €

Nutella 13,1 €

Milka 12,4 €

Eroski 8,8 €

Eroski 2 sabores 8,4 €

Natra 4,9 €