La prevención, el mejor detector
En Europa mueren anualmente 4.000 personas a causa de los incendios y en España esta cifra ronda los 150 fallecidos; a diario se producen entre 50 y 80 incendios domésticos, que en el 90% de las casos se extinguen sin provocar víctimas. No saber cómo reaccionar llegado el caso puede hacer que un pequeño fuego acabe en tragedia.
Más vale prevenir
/imgs/20070301/img.consejos.02.jpg Instale en su casa un detector de humo, dará la alarma de incendio con el tiempo suficiente para despertar y huir antes de que sea demasiado tarde. La instalación es sencilla y apenas necesita mantenimiento. El mejor lugar para colocarlo es el pasillo, donde puede ser escuchado desde toda la vivienda. En el mercado puede encontrar una amplia gama que comprende desde los icónicos -sensibles ante los humos invisibles-, los termovelocímetros -sensibles ante los cambios de temperatura-, los ópticos -sensibles a los humos visibles- y, finalmente, los detectores que actúan ante la presencia de llamas. También son útiles los detectores térmicos que avisan cuando se alcanza el máximo de temperatura fijado previamente. Todos los detectores deben estar complementados con indicadores como luces de aviso o sirenas.- Tenga un extintor portátil en casa y aprenda a usarlo. Puede evitar que un fuego pequeño se convierta en un gran incendio. Colóquelo en lugar visible y fácil de alcanzar. Asegúrese de su funcionamiento y de que esté siempre cargado.
- Los niños pequeños sienten una curiosidad natural por el fuego. Lo que empieza como exploración natural puede acabar en tragedia. Según el organismo para incendios de Estados Unidos, la tercera parte de los incendios en los domicilios que causan muertes infantiles se originan por niños que juegan con mecheros u otro tipo de materiales inflamables. Es importante no dejar solos en casa a los niños pequeños, ni siquiera por breves intervalos de tiempo.
Instalación eléctrica. Peligro de cortocircuito
- Revise la instalación eléctrica y cambie los cables estropeados. No realice empalmes provisionales.
- No sobrecargue los enchufes con aparatos electrodomésticos. El paso de la corriente produce calor y un aumento excesivo de éste puede llegar a inflamar el plástico que recubre los ladrones, ya sean los de pared o los que llevan incorporados un trozo de manguera, pudiendo producir un incendio.
- Nunca ponga un pañuelo encima de las lámparas para atenuar la luz, puede provocar un incendio.
- Si nota olor a tostado, revise y localice el origen, puede tratarse de un sobrecalentamiento de la instalación eléctrica que originará un peligroso cortocircuito o un incendio.
- Si usa calefactores eléctricos procure no utilizar cables alargadores. No los utilice para secar ropa o calzado ni los coloque cerca de cortinas, muebles y otros materiales combustibles.
En la cocina, extreme la precaución
- No use una prenda de vestir con manga larga o prendas anchas cuando cocine. Pueden prenderse fuego o voltear recipientes y provocar quemaduras.
- Mantenga limpia la campana extractora. La acumulación de polvo y grasa en los filtros prende con facilidad si llega a producirse un pequeño fuego.
- Si se incendia una sartén, apague la campana extractora, tápela con un paño húmedo o una tapadera. La falta de oxigeno hará que se apague solo. Nunca eche agua.
- Extreme las precauciones si almacena líquidos inflamables como gasolina, acetona, benceno, thinner (disolvente para lavados), alcohol, aguarrás, cemento de contacto o queroseno. Estos líquidos forman vapores invisibles explosivos que pueden encenderse por una chispa a una considerable distancia del recipiente. Deben almacenarse fuera de la casa, alejados de fuentes de combustión, lejos de los niños, en envases bien identificados, que no sean de vidrio, y bien cerrados.
- Conserve, además, las salidas de humos y entradas de aire bien limpias, y libres de grasa.
No se la juegue
- Si todavía utiliza una estufa catalítica que funciona con gas y calienta mediante una combustión producida por el gas butano y el oxigeno del ambiente, sepa que mientras el aparato funciona, el oxigeno disminuye, lo que puede llevar en casos extremos a la asfixia si la deja encendida durante la noche o no ventila adecuadamente la habitación donde se encuentra.
- Si se produce una fuga de gas no encienda ni apague luces, abra las ventanas y ventile el recinto, cerrando la fuente ( botella de butano, llave de paso en instalaciones de gas ciudad). Si fuera imposible hacerlo, por ejemplo en casos de roturas de conducción y desalojos la vivienda, hay que llamar a los bomberos.
- Si está fumando (la reacción inmediata puede ser tirar el cigarro al suelo) mantenga el cigarro en alto y diríjase a otra habitación para apagarlo. Nunca lo tire al suelo porque la mayor concentración de gas se encuentra precisamente a ras de suelo, ya que el butano es más pesado que el aire. Evite las corrientes de aire en la cocina que pudieran apagar el gas.
- Si fuma, utilice ceniceros grandes y profundos -mejor con agua- y no se olvide de apagar los cigarros, mojando las colillas antes de tirarlas a la basura. Procure no fumar en la cama o acostado en el sofá.
- Llame al teléfono de emergencias (112).
- Sólo intente apagar el fuego si es pequeño y controlable, situándose siempre entre el incendio y la vía de escape.
- Utilice el extintor si dispone de él, pero nunca vierta agua sobre un incendio en el que haya grasa, instalaciones eléctricas o líquidos inflamables porque el fuego se extendería más.
- Si el fuego está fuera de control no intente apagarlo, salga de la casa (antes hay que cortar el suministro de energía eléctrica con el interruptor general).
- Cierre puertas y ventanas para que la ausencia de oxigeno ahogue el fuego.
- Si no puede escapar, ponga telas o toallas mojadas alrededor de las puertas, para bloquear la entrada de humo. Acto seguido, arrástrese hacia las ventanas, ábralas, y grite para solicitar ayuda, agitando un pañuelo para llamar la atención.
- Si su pelo o la ropa se han incendiado cúbralos con una toalla, manta u otro material grueso y ruede para apagar las llamas pero nunca eche a correr.
- No permanezca erguido en medio del humo, intente escapar gateando y con la boca cerrada.