Los dispositivos de localización para niños y niñas permiten conocer en todo momento dónde se encuentra un menor, que a su vez puede pedir ayuda si la necesita. Es la antesala a los teléfonos móviles y pueden ser una buena ayuda para darles autonomía y seguridad. Eso sí, si se abusa de su uso, pueden ser contraproducentes.
Relojes con GPS y menores, ¿un buen binomio?
